La noche más larga: ¿qué hicimos para merecer esta película?

Moroco Colman se hunde en lo más profundo del fango, no profundiza en nada y opta por la acumulación de escenas de violaciones explícitas y repulsivas. Una lección ejemplar de cómo no se debe abordar la violencia de género en el cine.

25 de marzo, 2021 | 19.37

Cuando los varones buscan plasmar una historia cruda sobre la violencia de género y los horrores cotidianos que sufren las mujeres y femineidades, pueden ocurrir dos cosas: a) que lo producido tenga una cantidad de asesores de género que ayuden en el camino por lograr un contenido respetuoso con las víctimas y que alumbren en los tramos más oscuros o b) algo como el engendro que creó Moroco Colman en La noche más larga. Repulsiva e innecesariamente violenta.

La noche más larga parte de la historia real de las brutales violaciones perpetradas por Marcelo Mario Sajen entre 1991 y 2004 a 93 mujeres (según comprobó la Justicia de Córdoba) abusadas siempre en las inmediaciones del Parque Sarmiento. Las investigaciones del caso que shockeó a los cordobeses indicaron que habría más decenas de mujeres que habrían sido perpetradas por este monstruo. Es Daniel Aráoz -quien triunfa en MasterChef Celebrity 2- el encargado de darle vida al infame.

Si bien es sabido que Sajen capturaba a las víctimas a la salida del colegio, Colman elige dar vuelta el relato, alimentando la cultura patriarcal y machista del sistema en el que vivimos. En el giro propuesto las mujeres que salen para ir a bailar y van con "ropa provocativa" son raptadas para el goce del monstruo protagonista. Si hasta ahí la cinta es difícil de procesar, las escenas de violaciones explícitas en las penumbras o el hecho de mostrar primeros planos de mujeres gritando de dolor, son la gota que colma el vaso e indigna a cualquier espectador o espectadora con un mínimo de sentido crítico.

Estas decisiones estéticas que emplea Moroco Colman son inexplicables y preocupan. Profundizan en el placer de Sajen, en vez de repudiar el acto de horror. Y eso, en tiempos donde todos los días amanecemos con noticias de feminicidios, es impasable. Sobre el final del viaje, Colman busca limpiarse un poco de la carga aberrante del filme, utilizando un superficial mensaje de empoderamiento. La noche más larga no es un tropezón cinematográfico; es una caída desde un doceavo piso.

La noche más larga. Nuestra opinión: Mala. Guión y dirección: Moroco Colman. Elenco: Daniel Aráoz, Camila Murias, Sabrina Nuñez, Paula Halaban y Constanza Villarruel.

 

 

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