Neve Campbell saltó a la fama gracias a la franquicia Scream, ícono de género dirigida por Wes Craven, con Sidney Prescott, la heroína que vence a Ghostface en cada entrega y está de vuelta en Scream 5. Aprovechando el furor por su nuevo trabajo, reveló una anécdota pesadillesca que vivió durante un rodaje: fue perseguida y atacada por un oso.
Unos años antes de que Wes Craven la eligiese para liderar el reparto de Scream, la joven Neve de 17 años estaba con ansías de triunfar en Hollywood. Ee fue el motivo que la llevó a participar de una filmación que le propuso relacionarse con oso para ensayar una escena en la que el animal debía perseguirla. No haberse negado le costó una de las peores experiencias de su vida, en materia de rodajes.
“Estaba interpretando un personaje que tenía una gran conexión con los animales y había una escena en la que un oso me perseguía. Trajeron a este oso al set y primero me dieron una gran botella de gaseosa para darle de comer. Después de alimentarlo, me pidieron que moje mi mano en miel y salga corriendo. ‘Cuando llegues al árbol de allí, sacá la mano y alimentá al oso’, me señalaron”, detalló Neve en diálogo con The Kelly Clarkson Show
Para desgracia de la actriz, la escena no salió según lo previsto: “Metí la mano en la miel y corrí hacia donde me habían indicado. Me di la vuelta y saqué la mano, pero el oso no se detuvo. Me agarró una pierna y me arrastró a través del bosque. Mi madre estaba visitando el set y no paraba de gritar, en estado de pánico. Todo el equipo se quedó helado, porque nadie podía creer lo que estaba pasando. En lo único que yo pensaba era en que el oso me estaba mordiendo”.
MÁS INFO
La situación extrema evidenció la inexperiencia total del equió de rodaje, que no tenía un plan de auxilios para asistir a Campbell. Mordida por el oso, la actriz logró zafarse del ataque gracias al cuidador, que logró espantar al animal arrojándole piedras para distraerlo. Aunque califició la anécdota como "una estupidez", la estrella de Scream aseguró que jamás volvería a prestarse para una escena semejante.