“Si Argentina no se clasifica, te quedás con la tele y te devolvemos el dinero”, proponía Noblex, conocida firma de electrodomésticos, en la previa para el Mundial de Rusia 2018. El slogan del sponsor oficial de la Selección provocó un estallido de ventas de televisores y la creciente preocupación de un equipo de marketing que apostó todo a Messi, a riesgo de que la empresa terminase en una pérdida multimillonaria. La trágica historia con final alegre -Argentina clasificó tras vencer por 3 a 1 a Ecuadro, en Quito- llegó al cine en El gerente, una comedia de Ariel Winograd protagonizada por Leonardo Sbaraglia en el protagónico. En diálogo con El Destape, el respetado actor presentó el filme, su segunda colaboración con Winograd tras la celebrada Hoy se arregla el mundo (2021), y habló sobre la fiebre futbolera de componer un personaje que estuvo a un paso de caer por la borda en la historia de las campañas publicitarias.
- La historia real es una tragedia con suerte, pero acá está contada en clave de comedia, ¿pudiste charlar con el gerente de Noblex?, ¿qué te contó sobre la campaña?
Él armó toda esta campaña con un equipo, de hecho esto fue una idea del departamento creativo de la empresa. En el caso de la película, esta situación está enfocada en la cabeza y la responsabilidad que tiene Álvaro, mi personaje. Y esto hace que se encuentre con una gran encrucijada en su camino, un conflicto interno.
- ¿Qué tipo de comedias son las qué más disfrutás?
Las de Woody Allen. Creo que con su estilo y con la forma en que aborda el humor ha hecho excelentes películas, que atraviesan los grandes conflctos humanos y las relaciones. También disfruto mucho las inglesas. La cuestión es que hacer una comedia es muy difícil pero, al mismo tiempo, cuando empezás a entrar en la ola del tono, lo encontrás, y tenés un equipo como el que me tocó en El gerente, se logran películas muy afortunadas. En este caso hubo un componente vincular muy fuerte, dada la relación ya familiar que tengo con Cecilia Dopazo, con quien no trabajaba desde Caballos Salvajes, y Valentín Wein.
- ¿Qué es lo más difícil de hacer una película de género?
Encontrar el tono y la caracterización adecuada para el personaje. En el caso de Álvaro, un hombre gris y burócrata que se torna interesante cuando decide patear el tablero de la propia empresa en la que trabaja y se da cuenta que la vida le empieza a corresponder a eso.
- ¿Te gusta el fútbol?, ¿esperás el Mundial?
Soy futbolero, pero no soy como los fanáticos que siguen absolutamente todo sobre sus equipos. Soy hincha de River, el otro día fui a la cancha por la despedida de Gallardo. En el caso del Mundial, me encanta seguirlo y miraría los partidos de todos los equipos (risas).
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