Dura 72 minutos: la película nacional del nazi que hizo experimentos con humanos y cuyos restos fueron detectados por forenses argentinos

El documental argentino Tras las huellas de Mengele puede verse en el cine Gaumont, en la Ciudad de Buenos Aires.

23 de septiembre, 2024 | 17.34

El documental Tras las huellas de Mengele, una coproducción entre Argentina y Brasil que sigue las pistas de los últimos días del jerarca nazi Josef Mengele, ya puede verse en el cine Gaumont, emblemático espacio INCAA ubicado en la Ciudad de Buenos Aires. Trama de la película, horarios y cuánto sale la entrada para verla.

"En junio de 1985, los restos del Ángel de la muerte fueron exhumados en el cementerio de una pequeña comunidad rural de Brasil. Josef Mengele aparecía otra vez ante el mundo. ¿Cómo fue que uno de los máximos jerarcas nazis fue a morir a ese lugar recóndito? ¿Quiénes lo protegieron durante más de cuarenta años? ¿Qué secretos revelan sus huesos?", revela sinopsis del documental Tras las huellas de Mengele, dirigido por Tomás de Leone y Alejandro Venturini.

El médico, genetista y genocida alemán Josef Mengele arribó a la Argentina el 22 de junio de 1949 bajo el nombre falso Helmut Gregor. Luego de vivir en la Argentina, Mengele se refugió en Paraguay hasta que consiguió refugiarse en Brasil en medio de los juicios contra los nazis. El fugitivo que logró escapar a la Justicia murió en Brasil en libertad, y el documental argentino reconstruye la cobertura mediática del descubrimiento de los restos fósiles que lo identificaron en Latinoamérica y cerraron uno de los capítulos más horrorosos de la historia mundial. Tras la huellas de Mengele puede verse en el cine Gaumont (Avenida Rivadavia 1635, CABA) a las 13, 14.30 y 20.20 horas.

La increíble historia real del cazador de nazis que estrechó un vínculo con el arquitecto de Hitler

Un día de mayo de 1975, el famoso cazador de nazis Simón Wiesenthal recibió una inesperada visita en su oficina del Centro de Documentación de Viena. Su visitante era nada menos que Albert Speer, el ex arquitecto y ministro de Armamentos de Hitler. ¿Cuál era el motivo de este encuentro?, ¿de qué hablaron?, ¿qué se dijeron? ¿qué diálogo era posible entre un victimario y una víctima del Holocausto?

Simon Wiesenthal fue una figura de vital importancia en la construcción de la memoria y justicia de las víctimas del Holocausto. Pese a las polémicas que tuvo en vida -hay documentos que indican que sus libros autobiográficos están llenos de imprecisiones, contradicciones y datos falsos- Wiesenthal fue considerado uno de los "cazadores de nazis" más famosos del mundo hasta su muerte en 2005, a los 96 años. "Ya hice mi tarea. Los sobreviví a todos ellos. Si queda alguno ya está demasiado viejo y débil para enfrentar a los jueces", señaló en declaraciones de ese momento.

Del otro lado, Albert Speer fue conocido como "El Arquitecto" de Hitler, quien llegó a tenerle gran estima. Con ese cargo, cumplió a rajatabla las fantasías mesiánicas del dictador hasta su caída. En el proceso de enjuiciamiento a los partícipes de la masacre judía en la Segunda Guerra Mundial,  se decidió que Speer quedaría recluido en la Cárcel de Spandau, donde pasó solo veinte años ya que logró engañar al jurado de Nüremberg. Tras su salida de prisión, Speer publicó sus Memorias y separado de su familia -que no quiso estrechar un nuevo vínculo con él- y trató de instalar el mito del "nazi bueno" en su imagen personal. Tiempo después de su condena, se comprobó que Speer mintió en sus declaraciones sobre el genocidio y se llegó a la conclusión de que tenía pleno conocimiento de los horrores que acontecían en Auschwitz y el resto de los campos de concentración.