(Por Eva Marabotto) - Con el mítico Martín Karadagian y sus "Titanes en el Ring" como eje, una exhibición en El Obrador Centro Creativo reúne fotos, muñecos, disfraces, afiches, películas, juegos de mesa y los míticos muñecos en miniatura que salían en los chocolatines para recordar y compartir aquella pasión de traspasó la pantalla para llegar al seno de las familias argentinas.
La muestra, que hasta el 25 de agosto tiene entrada libre y gratuita de martes a viernes, de 11 a 19, fue inaugurada por Paulina Karadagian, la hija del luchador y por cinco de los titanes: el payaso Pepino, el Caballero Rojo, la Momia Negra y la Momia Blanca.
Para Paulina Karadagian, hija del creador del mítico Titanes en el ring, la pasión por el catch y los entrañables personajes del ciclo televisivo se transmite como una tradición oral. A Billy Jim, uno de los integrantes de la troupe original que dirige a los nuevos titanes, lo sorprendió que en los shows coreen su nombre chicos que nunca vieron pelear a Karadagian.
Este contenido se hizo gracias al apoyo de la comunidad de El Destape. Sumate. Sigamos haciendo historia.
Esta muestra evoca un festejo por partida doble: los 100 años del nacimiento de Martín que se cumplieron el 30 de abril y los 60 del ciclo televisivo que arrancó el 3 de marzo de 1962.
La sala, ubicada en Bartolomé Mitre 1670, reúne material inédito, trajes, fotos, videos y merchandising, desde la colección completa de los muñequitos de los personajes que venían con los chocolatines Jack, a la vestimenta de David el Pastor, la Momia y el Caballero Rojo.
Los visitantes también podrá disfrutar de juegos de mesa, mazos de cartas, figuritas y álbumes de diversas épocas, las películas que protagonizaron los Titanes reunidas a partir del préstamos del Museo del Cine y varios coleccionistas fanático, deseosos de compartir sus tesoros con los seguidores del programa que convirtió la lucha libre en un espectáculo. Loa organizadores adelantan que habrá visitas, sorpresas, y la proyección de las dos películas de los luchadores.
Esta es una manera de homenajear a papá y al programa y de mantenerlos vivos. Y este festejo sigue con un show con la nueva troupe, sintetizó en diálogo con Télam Paulina Karadagian, mientras a su lado, Billy Jim sintetiza: Titanes es Disney. Siempre genera algo más. En este caso una muestra que congrega a fanáticos de todas las edades.
De la mano de su hija Louisana, de cinco años, Luis Giorgis, le da la razón. Recorre la sala y señala algunos de los objetos que trajo desde su casa en la localidad santafesina de Cañada de Gómez. No soy partidario de los fanatismos pero me gusta Titanes desde antes de nacer ya que mi mamá, que era de Buenos Aires, iba a ver a Karadagian al Luna Park. Cuando mi papá se compró su primer televisor, lo estrenó viendo Titanes. Por eso yo empecé a coleccionar sus cosas, y, con el tiempo, también pude conocerlos. Tengo grandes tesoros y es muy lindo compartirlos como lo hago con mi hija que ve conmigo la película de 1973, cuenta.
El curador de la muestra, el periodista y director teatral Pablo Gorlero, recupera la fascinación que el programa generó y todavía genera en la gente: Titanes no sólo representó el combate entre el bien y el mal. Tenía magia. Gambeteó el vituperio de la dictadura, cautivó tanto a los adultos como a los niños, aspiró a cierta pretensión didáctica y se afianzó a la gloria eterna. Martín, El Caballero Rojo, Pepino, el Ancho Peucelle, el Leopardo, el Pibe 10 y el Androide son portadores de una mística que acaricia la eternidad.
De esa magia tampoco pudo sustraerse Federico Recagno, el director de El Obrador, quien se dio el lujo de festejar su cumpleaños número 40 con todos sus amigos disfrazados de los personajes de Titanes. A él le cupo el máximo honor: relatar la Doble Nelson y los Cortitos que intercambiaban los luchadores. ¿Cómo hace uno para traducir los recuerdos y traerlos al presente? Los pasa por el corazón. Se ve en la gente que está acá abrazando a los luchadores, como si estuviese abrazando su historia porque son cosas que queremos transmitir a las siguientes generaciones. Porque nos hicieron felices, sintetiza, pegado al ring donde la Momia, el luchador sordomudo ensaya sus mejores golpes.
Uno de los que multiplicó las selfies con los luchadores fue Ariel, quien prefiere evitar dar el apellido, porque salió antes del trabajo para no perderse el evento. Le cuenta a su esposa por audio de Whatsapp cada una de las imágenes y promete volver con ella para mostrarle cada detalle. Yo soy del 73 y en esa época todos crecimos con el programa, los muñequitos, las cartas, los discos con las canciones, que tengo guardadas en algún cajón, pero sobre todo en el corazón. Aún hoy llego a ver dos peleas de los Titanes por día en Youtube, asegura. También recuerda que conoció a Martín en el aeroparque metropolitano en 1983 y el Titán le dio la mano. Era un gran tipo, un luchador de la vida. Fue y será mi ídolo, relata emocionado mientras señala el ring que hay en un lugar de la muestra y recuerda que junto a sus hermanos armaban el suyo con sogas de lavar la ropa y una colcha Palette en el piso.
Esta exhibición pretende ser un viaje. No sólo al universo de Titanes en el Ring, sino a nuestra infancia, a nosotros mismos, cuando tomábamos café con leche frente al televisor, invita Gorlero al que parece ser un gran plan para hacer en familia durante las vacaciones de invierno.
Con información de Télam