Cuatro hombres serán juzgados por el robo de un inodoro de oro, obra del polémico Maurizio Cattelan

07 de noviembre, 2023 | 09.41

Cuatro hombres quedaron formalmente acusados del robo, en 2019, de un inodoro de oro que se encontraba emplazado en el palacio de Blenheim, un castillo del sur de Inglaterra que ha sido declarado patrimonio mundial de la Unesco.

Se trataba de una obra realizada por el artista italiano Maurizio Cattelan, que se hizo conocido hace cuatro años cuando, en la Feria Art Basel de Miami, en Estados Unidos, presentó como obra de arte una banana pegada con cinta adhesiva a la pared.

Todos ellos deberán comparecer ante el tribunal de Oxford el próximo 28, informó la fiscalía de la Corona (CPS, por sus siglas en inglés).

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El inodoro, construido en oro de 18 quilates, se encontraba instalado frente a la habitación donde nació el primer ministro británico Winston Churchill en 1874, y fue sustraído en 2019 por cuatro hombres de entre 35 y 39 años, ahora detenidos, según informó la agencia AFP.

Conocida con el nombre de "América", esta obra de Cattelan había sido discutida ampliamente en los medios y en el mundo del arte tanto por su valor material como por su lectura irónica sobre la opulencia y el arte contemporáneo. La pieza consta de una taza con asiento y cisterna de oro de 18 quilates y está valorada en en 1.250.000 dólares.

El inodoro había sido emplazado en una cámara hecha con paneles de madera, por lo que era totalmente operativo, y se colocó justo en frente de la habitación donde nació el famoso primer ministro en 1874. En 2019 formó parte de una exposición sobre el artista con la particularidad de que podía ser usado por los visitantes, que tenían la oportunidad de disfrutar del objeto en soledad durante tres minutos.

Lo que nadie podía imaginar, y menos que nadie Edward Spencer-Churchill, fundador de la Fundación de Arte Blenheim, es que alguien podía llevarse tranquilamente el artefacto. En declaraciones a The Times, el herededo del estadista inglés había afirmado que no tenía intención de protegerlo especialmente ya que, debido a su gran peso y a que estaba conectado con las tuberías del edificio, no iba a ser fácil de robar. Sin embargo, los hechos dejaron expuesta la debilidad de sus convicciones.

Así, el sábado 14 de septiembre pasado, el retrete fue robado y se inició una pesquisa que finalizó con los cuatro detenidos obligados a comparecer en un tribunal de Oxford el próximo 28 de noviembre: James Sheen, de 39 años, ha sido acusado de robo, conspiración para trasladar bienes robados y transferencia de bienes robados; Michael Jones, de 38 años, fue acusado de robo; mientras que Fred Doe, de 35 años, y Bora Guccuk, de 39, fueron acusados de conspiración para trasladar bienes robados.

"Cuando me despertaron para darme la noticia pensé que era una broma. ¿Quién va a ser tan idiota de robar un inodoro? Se me olvidó durante una fracción de segundo que era de oro", aseguró el propio Cattelan al diario The New York Times cuando se conoció la noticia del robo.

La policía británica afirmó que los ladrones habían ingresado en el palacio por la noche y salieron temprano de madrugada con el inodoro tras arrancarlo de las cañerías, lo que causó importantes daños y una inundación. Por ahora se desconoce qué ha sido del inodoro dorado.

Cattelan, el autor de la obra, fue creador de la banana pegada a la pared con cinta aislante en la Feria Art Basel de Miami, una pieza con la que al igual que el retrete pretende crear sorna, escándalo, risa, crítica, indignación y sorpresa. Además de guiños artísticos al urinario de Marcel Duchamp o a las latas con excrementos de Piero Manzoni, la instalación provoca una catarata de significados que ya ha tratado la obra del artista: los excesos del mercado del arte, la desigualdad económica o el significado de la creación artística.

Con información de Télam