¿Qué tan oscuro es el espacio exterior? Esta pregunta puede haber pasado por la cabeza de mucha gente y hasta incluso pudo ser un tema de debate entre familiares o amigos, sin lograr ninguna conclusión contundente. Sin embargo, un grupo de astrónomos se decidió a poner luz sobre esta pregunta que es más que algo trivial, a través de una estimación sobre la oscuridad del espacio profundo, utilizando datos de la sonda New Horizons de la NASA.
Más allá de resolver una incógnita para muchos aficionados a los temas espaciales, el estudio tuvo como objetivo comprender mejor el fondo óptico cósmico (COB), una luz extremadamente débil que permea el universo. El COB es el resplandor residual que resulta de la formación y destrucción de innumerables estrellas y galaxias a lo largo de los 13.800 millones de años de historia del universo. Esta luz casi imperceptible se considera la versión visible de la radiación de microondas cósmicas (CMB), que es el eco del Big Bang. Para los astrónomos poder comprender este brillo cósmico permite investigar cómo y dónde se formaron las galaxias y las estrellas.
Qué tan oscuro es el espacio exterior: la respuesta científica
Pero en definitiva ¿Qué tan oscuro es el espacio exterior? Según el estudio, el espacio es 100 mil millones de veces más tenue que la luz solar que llega a nuestro planeta.
¿Cómo se llegó a esa conclusión? Marc Postman, astrónomo del Instituto de Ciencia del Telescopio Espacial en Baltimore y autor principal del estudio, planteó una pregunta intrigante: "Si levantas la mano en el espacio profundo, ¿Cuánta luz te proyecta el universo?" Gracias a los datos de la sonda New Horizons, pudieron acercarse a una idea más clara de cuán oscuro es realmente el espacio, consignó el medio especializado The Astrophysical Journal.
MÁS INFO
Desde su lanzamiento en 2015, la sonda viaja más allá de Plutón y actualmente se encuentra a 5.500 millones de millas (8.700 millones de kilómetros) de la Tierra. Una de las grandes ventajas de usar a New Horizons para esta investigación es su ubicación alejada de las fuentes de luz del sistema solar interior, lo que permite obtener mediciones más precisas del COB. En el verano de 2023, la sonda escaneó varias regiones del universo con su cámara, enfocándose en áreas alejadas de estrellas brillantes y del resplandor de la Vía Láctea. Como resultado, se lograron imágenes de los cielos más oscuros observados hasta ahora.
Al analizar los datos, los científicos pudieron estimar el brillo generado por el polvo en el halo de la Vía Láctea, llegando a una cifra de aproximadamente 11 nanovatios por metro cuadrado. Este número coincide con las estimaciones sobre la cantidad de galaxias que se han formado desde el Big Bang. Tod Lauer, coautor del estudio y astrónomo en el NOIRLab de la Fundación Nacional para la Ciencia en Arizona, señaló que muchos intentos previos de medir el COB desde el sistema solar interior tenían grandes márgenes de error. Sin embargo, New Horizons permitió reducir estas incertidumbres, ofreciendo una visión más clara de la luz cósmica de fondo.
El otro descubrimiento clave
Un hallazgo significativo de esta investigación es la ausencia de evidencia de luz adicional proveniente de fuentes desconocidas, lo que aclara dudas sobre la existencia de posibles fuentes exóticas que pudieran contribuir al brillo cósmico. La sonda New Horizons sigue su camino a través del Cinturón de Kuiper, una región poco explorada del sistema solar. Aunque el futuro de la misión es incierto, la NASA decidió extender sus operaciones hasta 2028, y el equipo de la misión asegura que la nave tiene suficiente combustible para continuar funcionando al menos hasta 2040.