El grupo de investigadores de la firma de seguridad informática ESET alertaron este martes por un nuevo engaño que tiene como objetivo a los beneficiarios del Ingreso Familiar de Emergencia (IFE). Al parecer, los estafadores se comunican primero vía WhatsApp con un mensaje en el que afirman pertenecer a la ANSES y que al usuario le corresponde el Ingreso Familiar de Emergencia, por lo que se contactan para ayudar a cobrar el beneficio.
El servicio de mensajería permite configurar la cuenta como empresa para enviar muchos mensajes a la vez. Aquel que no se percata del origen del que le escribe, quien modificó la foto de perfil por un logo oficial, parece que lo recibe de una institución y no un individuo.
Luego, se comunican telefónicamente y solicitan acercarse a un cajero con la tarjeta, para hacer de guía y acercar los pasos para cobrar el dinero.
"En principio los delincuentes no tienen conocimiento previo sobre quién cobra esta asignación. Los ataques se hacen por spam a miles de personas, por no decir millones de teléfonos, con el objetivo que alguien responda. A partir de esa instancia comienza la ingeniería social para obtener datos privados de la víctima y llevar adelante la estafa", dijo Luis Lubeck, especialista del laboratorio de ESET Latinoamérica, al diario Clarín.
Durante la comunicación telefónica derivan a la víctima a distintos supuestos operadores de ANSES como distracción e incluso utilizan el mismo audio que utiliza la entidad oficial para las llamadas en espera y así disuadir por completo al estafado.
Una vez en el cajero, en caso de seguir los pasos indicados y, creyendo que se está ingresando el código para cobrar la IFE, la víctima modifica su clave de home banking por una que le indicaron los estafadores, secuestran su cuenta y sacan un préstamo a su nombre.
Las consecuencias de la estafa
En el caso al que ESET tuvo acceso, los ciberdelincuentes solicitaron un préstamo preaprobado en el Banco Ciudad a nombre de la víctima por 200.000 pesos a pagar en 36 cuotas. La víctima fue la hermana de la colega Cecilia Bonna, quien hizo un descargo desde su perfil de la red social Twitter.
“Un usuario sin mayor conocimiento de quienes tienen acceso a la IFE y dada la incertidumbre económica que muchas personas atraviesan por la situación actual que se vive a raíz de la pandemia, la posibilidad de obtener el beneficio resulta atractiva y permite caer en el engaño de manera más fácil“, explicó Luis Lubeck.
Si bien en este caso en particular la red bancaria detectó movimientos sospechosos, detuvo la transferencia y bloqueó el acceso a la cuenta, recién pasados algunos días la víctima pudo volver a recuperar el acceso, tiempo en el que los estafadores habían llegado a transferir 80.000 pesos.
En un primer momento el usuario afectado creyó que le habían robado el dinero de la cuenta, hasta que comprobaron que en verdad la estafa tenía como objetivo un préstamo bancario.
Al denunciar lo que ocurrido en el banco, la entidad financiera les comentó que muchas personas están siendo víctimas de esta estafa y que la única opción que tenían era cancelar parte del préstamo y pagar en cuotas el resto.