WhatsApp es la aplicación de mensajería instantánea más utilizada en todo el mundo y como tal también es una de las apps preferidas por los delincuentes informáticos para realizar estafas, según reveló recientemente un grupo experto en ciberseguridad. Un análisis de una empresa de seguridad cibernética detectó en WhatsApp más de 90 mil enlaces maliciosos. Entre las recomendaciones para evitar caer en estas estafas, recomiendan prestar mucha atención a posibles errores ortográficos u otras equivocaciones.
Con más de 2.000 millones de usuarios activos, WhatsApp es la aplicación de mensajería instantánea preferida por el público, incluidos los delincuentes informáticos. A pesar de la polémica por las modificaciones en las políticas de privacidad de la plataforma que provocó el éxodo de miles de usuarios a Signal y Telegram, entre otras, la propiedad de Facebook sigue siendo la más elegida por el público en general. De esta manera también se convirtió en la preferida de los ciberdelincuentes para estafar.
Según un análisis realizado por la empresa de ciberseguridad Kaspersky, se detectaron más de 90 mil enlaces maliciosos en WhatsApp. La investigación fue realizada en dispositivos con Android, y descubrieron que entre diciembre del 2020 y mayo del 2021 el 89% de estos enlaces fueron enviados a través de WhatsApp. El segundo fue Telegram, con tan solo el 5% de los links maliciosos. También registraron unas 480 detecciones por día.
Desde Kaspersky aseguraron que los delincuentes informáticos prefieren WhatsApp para realizar sus estafas porque es la aplicación más utilizada, lo que les facilita llevar a cabo prácticas comunes como el phishing, como se denomina a los fraudes basados en la suplantación de identidad. "El phishing en las aplicaciones de mensajería instantánea sigue siendo una de las herramientas más populares entre los estafadores", consideró Tatyana Shcherbakova, analista senior de contenido web en Kaspersky.
"Esto se debe, en parte, a la gran popularidad de estas aplicaciones entre el público, así como a la posibilidad de utilizar la funcionalidad incorporada de las aplicaciones para llevar a cabo ataques", explicó la propia Shcherbakova. Además, otro dato surgido de diversas investigaciones indica que las aplicaciones de mensajería superaron por un 20% a las redes sociales el año pasado, respecto a la popularidad entre los usuarios, convirtiéndolas en la herramienta de comunicación más popular. Desde la misma compañía que difundió estos resultados sugieren a los usuarios estar atentos a los más mínimos detalles y errores de ortografía u otras irregularidades en los links que reciben para evitar caer en este tipo de estafas.