Una pareja decidió comprarse un nuevo televisor para disfrutar de sus ratos libres, pero la elección del novio generó que su novia realice un posteo en X (Ex Twitter) por los problemas que una TV de 85 pulgadas presentó para la decoración de la casa. Y la respuesta provocó varias sorpresas.
Al momento de decorar el living, una pareja tomó la decisión de comprar un televisor nuevo para disfrutar de las mejores series y películas. Sin embargo, este proceso se transformó en una polémica que tuvo como consecuencia la transformación casi total de la habitación.
"Quedamos de acuerdo en que mi novio iba al centro a comprar un tele para el living", comentó Cintia, más conocida como 1889cintia en X, y adjuntó una foto parada al lado de la TV de 85 pulgadas. Aunque en su rostro se puede apreciar cierto enojo y sorpresa.
Es que la elección de su pareja generó un hecho bastante particular. "Volvió con un Samsung de 85 pulgadas, listo para poner en jaque toda la decoración que venimos pensando hace cuatro meses", sentenció. El tamaño del aparato provocó que desplacen la mesa, además de pensar en una nueva, o que se considere la idea descolgar cuadros de la pared.
Por otro lado, la joven expresó que se tomó con cierta gracia la compra que hizo su pareja. "El tele está a 3.5 metros del sillón. El problema no es el tele, es el novio", comentó. Una situación divertida que todavía no encontró solución, pero sí está claro que no hubo cambio aparato.
Profesor japonés crea una pantalla de televisión para saborear
En Japón, un profesor tuvo la idea de poner en marcha y materializar un proyecto con un televisor que generó bastante polémica. Porque es uno que puede ser lamido para poder experimentar ciertos sabores que se proyectan sobre la pantalla.
"El objetivo es hacer posible que la gente tenga la experiencia de algo parecido a comer en un restaurante del otro lado del mundo, incluso estando en casa", explicó este profesional que se desempeña en la Universidad de Meiji Homei Miyashita.
El truco detrás de este televisor es que cuenta con unas 10 latas de sabores que se rocían en combinación para intentar recrear el alimento que el usuario le indique. Lo cual permite entender que los más tradicionales pueden llegar a estar representados, mientras que los más exóticos es poco probable probarlos. O sí, pero que su grado de exactitud no sea elevado.
Este prototipo fue bautizado como TTTV (Taste the TV) y se encuentra en su fase de desarrollo, y se estima que la versión comercial del mismo podría llegar a valer 100.000 yenes, que al tipo de cambio serían 875 dólares.