Al momento de despertarse, las personas deben considerar de gran manera cuál es el primer pie que apoyan en el suelo antes de comenzar el día laboral o de estudio. Una mala elección podría desatar una serie de resultados inesperados que podrían generar la atracción de la mala suerte. La tradición señala que nunca debe usarse el pie izquierdo para salir de la cama.
Hay una serie de rituales y consejos que las personas tienen en cuenta en el día a día para evitar la presencia de mala suerte en sus vidas. Algunos no disponen de un origen muy claro, mientras que otros se mantienen vivos en la sociedad con el boca a boca con el paso de los años. Uno muy particular es el que menciona la chance de contraer noticias inesperadas con solo levantarse de la cama después de una noche de sueño.
"Al levantarse, el primer pie que tocaba el suelo tenía que ser el derecho, de lo contrario tenían que volver a acostarse y levantarse de la cama de la manera correcta. Al entrar en sus casas, debían respetar la misma regla", expresó Roma Historia, como figura su usuario en X (ex Twitter). Una tradición que se mantiene vigente hasta la actualidad y que muchos recuerdan antes de dar el paso que marcará el inicio del día.
Además, esta costumbre se replicaba cuando un conjunto de personas ingresaba a un lugar. Algunos relatos señalan que en la puerta de diferentes hogares, comercios y teatros se podía divisar un hombre encargado de recordarle a los presentes que miraran bien con qué pie iban a dar el paso de ingreso. No se trataba de un trabajo más, sino de uno muy valorado con el fin de ayudar a que la mala suerte no se haga presente en las reuniones sociales.
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De dónde viene la creencia de que los gatos negros dan mala suerte y por qué es errónea
Hay una creencia que se repite bastante y es que cruzarse a un gato negro es señal de que la mala suerte golpeará la vida de las personas. Es por ello que muchos al verlos por la calle deciden cambiar de vereda para evitar que aparezca en el camino o eligen dar media vuelta y tomar ruta distinta hacia el destino donde se quieren desplazar.
Sin embargo, no hay ninguna explicación de que los felinos con este pelaje sean los causantes de las malas decisiones que las personas ejecutan. De hecho, la tradición expone que estos animales son considerados como sagrados en diferentes culturas antiguas, debido a que transmitían paz, sabiduría, prosperidad y brindaban una protección contra los malos espíritus.
La creencia de que los gatos negros son portadores de la mala suerte es producto de una leyenda celta porque creían que eran la reencarnación de seres demoníacos, mientras que en la edad media se los vinculaba con la presencia de una bruja dentro de la sociedad.