En las redes sociales, en especial en Shorts de YouTube, se hizo muy comentado un video de fútbol que expone una jugada bastante particular que provocó la sanción de un jugador por parte del árbitro. La reacción del juez fue inmediata porque tardó menos de 10 segundos en sancionar la falta. Algo que fue producto de una palabra que se encuentra prohibida en el reglamento.
El pequeño filme muestra como un jugador realiza un saque de lateral mientras otro aparece en escena rápidamente para tener el control del balón y así iniciar con fluidez una jugada de ataque contra el arco contrario. Sin embargo, el árbitro se dirigió hacia este y le señaló que había falta. Algo que provocó cierta sorpresa entre las personas que estaban disputando el partido.
"Goyo", expresó uno de los jugadores en cancha. Pero, el juez entendió "voy yo", y por reglamento pronunciar esta frase genera que el partido deba frenarse. A razón de que se considera una maniobra de distracción y que puede generar que el adversario frene su andar. Si bien, se enuncia más de lo que las personas creen, son pocos los que se ajustan a las normas.
De hecho, expresar "voy yo" es considerado en las reglas como "juego verbal engañoso", y se trata de un lenguaje que distrae a los rivales. En el video se puede apreciar que los miembros del equipo tratan de hacerle entender al árbitro que el nombre del jugador es "Goyo" y que se produjo un mal entendido por la rapidez en que se lo pronunció.
Pasó en la Liga Profesional y terminó con una amonestación
Hace unas semanas, en un partido que Argentinos Juniors y Huracán disputaron en La Paternal se registró una jugada similar que terminó con la amonestación de Nicolás Oroz. Algo que fue posible porque el árbitro estaba muy cerca y escuchó a la perfección que le pidió al jugador del Globo que se haga a un costado mientras lo tenía por delante. Se trata de una estrategia que está penada en el reglamento y que había dejado de usarse, pero que contaba con una gran popularidad.
En la repetición de la jugada, se puede apreciar que Rodrigo Echeverría se estaba preparando para recibir el balón aunque se frenó segundos antes de pegar el salto y se dio vuelta porque pensaba que un compañero suyo estaba mejor ubicado para quedarse con la posición. Sin embargo, se trató de un adversario que aprovechó la ventaja de tener una mirada privilegiada.
No hay registro de cuál fue la palabra utilizada, pero sí que fue escuchada por Pablo Echavarría que no dudó ni un instante en hacer sonar su silbato y frenar la acción del juego, además de mostrarle la tarjeta amarilla a Nicolás Oroz. A veces se trata de una reacción legítima sin intención de generar distracción. No obstante, los jugadores deben cuidar las palabras que mencionan porque algunas están prohibidas.