Buenos Aires es una provincia que tiene acciones para todos los gustos: desde hermosos paisajes a actividades recreativas, centros culturales, gastronomía, edficios, museos y mucho más. Pero según una especialista en viajes y turismo, aún existen rincones ocultos para visitar que podrías ser una joya para los aventureros urbanos. Algunos, son difíciles de acceder, otros tienen mucha historia o gozan de una imponente arquitectura. Hay tres sitios que prometen una experiencia inolvidable:
1. Palacio Tiburcia
Ubicado en el partido de Lobos, el Palacio Tiburcia es una joya oculta construida en 1895 por Tiburcia Domínguez, quien fue esposo de Del Carril, el primer ministro de economía de Argentina. Este palacio, de impresionante arquitectura, es propiedad privada y el ingreso está prohibido, pero su historia y la majestuosidad de su diseño hacen que merezca una mención especial. Aunque no puedas entrar, la mera mención de este lugar despierta la curiosidad sobre los secretos que esconde tras sus muros.
2. La Azotea Grande
En el partido de Lezama, La Azotea Grande es un edificio en ruinas que guarda vestigios de su pasado esplendor. Para llegar a este lugar, debes seguir un camino de tierra desde la RN2 hacia el río Salado. Aunque el sitio se encuentra en estado de derrumbe y es necesario tener cuidado por donde pisas, la atmósfera desolada de La Azotea Grande ofrece una experiencia única para los amantes de la arquitectura abandonada y los exploradores urbanos.
3. Salto de Agua “Cueva del Tigre”
Situado sobre el río Quequén Salado, en el límite entre los partidos de Tres Arroyos y Coronel Dorrego, el Salto de Agua “Cueva del Tigre” es una maravilla natural escondida. La mejor manera de llegar es tomando la ruta que se dirige hacia el balneario Reta. Este salto de agua, rodeado de un entorno natural imponente, ofrece una escapada perfecta para aquellos que buscan disfrutar de la belleza oculta de la provincia de Buenos Aires.
Cuáles son los mejores 5 lugares para ir en Buenos Aires en un día soleado, según la Inteligencia Artificial
1. Palermo, el corazón verde de la ciudad:
Con sus parques inmensos, sus bares y restaurantes de moda, y sus calles llenas de vida, es el lugar perfecto para pasar un día al aire libre. La Inteligencia Artificial de Google, Gemini, recomendó:
-
El Rosedal: un clásico que nunca falla. Con sus miles de rosas de todos los colores, es un espectáculo para la vista y el olfato. Podés alquilar una bici o simplemente sentarte a disfrutar del paisaje.
-
El Planetario Galileo Galilei: si te interesa la astronomía, este es tu lugar. Podés hacer una visita guiada y aprender un montón de cosas sobre el universo.
-
Los Bosques de Palermo: un pulmón verde en el medio de la ciudad. Ideal para hacer un picnic, salir a correr o simplemente caminar y relajarte.
2. Puerto Madero, la zona más moderna:
Si querés disfrutar de una vista espectacular del río y de los edificios más modernos de la ciudad, Puerto Madero es el lugar indicado. Podés caminar por la costanera, visitar alguno de los muchos restaurantes y bares, o hacer un paseo en barco por el Río de la Plata.
3. San Telmo, un viaje al pasado:
Si te gusta la historia y la cultura, San Telmo es un barrio que te va a encantar. Con sus calles adoquinadas, sus casas antiguas y su famosa feria de antigüedades, te sentirás como si hubieras viajado en el tiempo. No te pierdas la oportunidad de ver un espectáculo de tango en alguno de las muchas milongas que hay en la zona.
4. La Boca, un barrio lleno de color:
La Boca es uno de esos lugares que tenés que ver al menos una vez en la vida. Con sus casas coloridas, su ambiente festivo y su famosa calle Caminito, es uno de los barrios más pintorescos de Buenos Aires. Podés visitar el estadio de Boca Juniors, el museo de la Pasión Boquense o simplemente pasear por las calles y disfrutar de la música y la danza.
5. Plaza de Mayo y alrededores:
Si querés conocer un poco más de la historia de Argentina, la Plaza de Mayo es un lugar que no podés dejar de visitar. Rodeada de edificios históricos como la Casa Rosada y la Catedral Metropolitana, es el corazón político y cultural de la ciudad. Después de visitar la plaza, podés recorrer las calles de Monserrat y San Nicolás, donde encontrarás muchos edificios antiguos y lugares de interés histórico.