Este lunes 13 de mayo ingresaron los familiares de los participantes a la casa de Gran Hermano. Con tan solo 9 concursantes en carrera, la producción decidió que entraran los seres queridos de ellos para acompañarlos en este tramo final de la competencia y guiarlos en sus jugadas por algunas semanas.
Tal como sucedió el año pasado, la producción eligió a ciertas personas allegadas a los concursantes para que entren a la casa de sorpresa. Esta vez, en su gran mayoría, son familiares diferentes a los que entraron durante el "congelados", ya que la idea es aportar una dinámica diferente a la casa y cierta frescura para cambiar un poco el clima de la competencia.
Por ahora, los familiares se quedarán únicamente hasta el domingo, pero tienen una misión muy compleja: el miércoles son candidatos a quedar en placa y, en la jornada de eliminación, el invitado que sume más votos quedará eliminado junto al competidor que fue a acompañar.. Lo que más sorprendió es que en esta ocasión entraron muchos amigos de los participantes en lugar de familiares directos que, en cambio, fue en el menor de los casos.
Quiénes son los familiares que ingresaron
- Facundo: amigo de Martín "El Chino".
- Aixa: mamá de Zoe.
- Rocío: amiga de Juliana "Furia".
- Noelia: amiga de Emmanuel.
- Franco: hermano de Bautista.
- Sol: amiga de Florencia.
- Mateo: amigo de Nicolás
- Francisco: hijo de Darío.
- Delfina: hija de Virginia.
El llamativo presagio de Furia de Gran Hermano sobre su enfermedad: "Dentro de unos meses"
Juliana "Furia" Scalgione es la participante de Gran Hermano 2023 (Telefe) que más polémicas genera dentro del reality. En las últimas semanas, comenzó a presentar algunos problemas de salud que encendieron todas las alarmas entre los médicos. Tras varios estudios, le diagnosticaron leucemia grado 1. A pesar de que se encuentra estabilizada y bajo vigilancia médica, recientemente la instructora de fitness tuvo una premonición sobre cómo será su estado de salud que preocupó a todos sus seguidores.
La salud de Juliana fue un tema de suma preocupación, tanto entre los jugadores y el conductor Santiago del Moro como entre los televidentes. A pesar del duro diagnóstico, los médicos le dieron el visto bueno para seguir en competencia, con la condición de que se sometiera a análisis de sangre rigurosos todos los meses para chequear que la enfermedad no avance, ya que aún no se puede realizar ningún tratamiento. En las últimas horas, "Furia" anticipó algo al respecto.
En medio de una cena con sus compañeros, Juliana manifestó: "Yo estoy muy encajetada acá adentro. Sé que la gente me apoya, por lo menos lo siento. Es algo que por más que me vengan o no a gritar, no importa. Yo lo siento". En este sentido, añadió que si está ahí "es por algo". "Lo digo siempre: 'El día que me vaya, porque la gente no me quiere acá, entonces, creo que si me pasa esto...’”.
Con respecto a su enfermedad, reflexionó: "A ver, yo hoy no me quiero morir, estoy viviendo el mejor momento de mi vida. Qué mejor que si me pasa algo, o ya sea dentro de unos meses... yo ya estoy viviendo el mejor momento de mi vida. Mi vida fue una locura completamente: desde tirarme de un edificio hasta ver fallecer a mi viejo... Mi vida fue un boom. Era todo el tiempo ‘boom, boom, boom, boom’. Yo sabía que algo grande se me venía y también cuesta un poco tragarse el dolor, o seguir adelante, o cagarme a palos... porque hacer alto rendimiento llega un momento en que, la verdad, te castiga. También creo que viene por el estrés, por decir ‘yo puedo con todo’. Son un montón de cosas", concluyó.
Por último, remarcó que su estado de salud no tiene nada que ver con la competencia: "Quiero que quede claro a la gente que no es por el estrés que me agarré acá. Porque yo acá no tengo ningún estrés. Para que quede clarísimo que yo entré a la casa siendo Juliana y me convertí en otra. Y agradezco muchísimo todo lo que crecía acá adentro".