Tristeza por la muerte que se anunció en El Trece: "Murió en mis brazos"

Una figura de El Trece se quebró al aire con una noticia desgarradora que entristeció sacudió al espectáculo.

20 de enero, 2025 | 18.28

El Trece amaneció con una noticia desoladora ya que una de sus figuras anunció una muerte que puso en duelo al equipo del programa Cuestión de Peso. El preocupante relato que conmovió a los televidentes y las palabras reconfortantes de Mario Massaccesi ante la situación.

Todo comenzó al aire de Cuestión de Peso cuando Marianella, una de las participantes más nuevas del reality, anunció que perdió a su perrito Eros, y Mario Massaccesi expuso ante la teleaudiencia: "Fue un fin de semana muy duro para vos… Es la primera vez que nos pasa. Ella contó que su refugio fue un atracón de comida". Con mucho dolor, la joven aclaró: "Me di un atracón, no me pude contener. Estaba muy angustiada, se me murió el perro en mis brazos. No puede hacer nada, me está haciendo muy mal".

"Mi familia estuvo muy preocupada, trató de hacer todo lo posible para que no cayera en la comida, pero no pudieron. Decidí venir para estar contenida, para no quedarme en mi casa a comer. El fin de semana estuve tirada en la cama todo el día", agregó, dolida por la situación. En ese momento, Mario Massaccesi la reconfortó con unas dulces palabras: "Si pudiéramos con todo, aún con los seres vivos que amamos, seríamos infalibles, pero lamentablemente no lo somos. Aunque demos todo, hay circunstancias, entre ellas la muerte, que no dependen de nosotros".

La carta de despedida de Marianella a su perro Eros

En sus redes sociales Marianella publicó una larga carta de despedida para su perrito y miles de sus seguidores se sintieron conmovidos: "El día que llegaste fue extraño, porque mi estado no era el mejor, y el tuyo tampoco, estabas asustado, tímido y sin ganas de estar donde estabas. Verte así generó el primer cambio, levantarme de la oscuridad que me envolvía, para hacerte sentir a gusto en tu nuevo hogar. Y así fue, en cuestión de horas ya estabas comiendo y yo muriendo de la ternura por tus payasadas. Poco a poco y casi sin darme cuenta, los dos nos adoptamos mutuamente y nos alegramos la vida".

"Hoy mi vida vuelve al lugar donde estaba antes de tu llegada, no tenerte a mi lado fue una tortura. Pero más dolorosa fue esa despedida, el momento exacto donde tuve que dejarte ir, donde tuve que soltar la esperanza de salvarte, donde tuve que hacerme a la idea de que ese sería nuestro último abrazo, tu última mirada de amor, nuestra última interacción. No sé que voy a hacer sin vos, sin que me persigas a todos lados, sin que me recibas al volver a casa, sin nuestras siestas abajo de la mesa, tus besos y sobre todo sin tu amor. Te vas en el momento donde sentí que volvía a tomar las riendas de mi vida. Pero qué injusta es la vida, siempre se lleva a los que amo. Te amo, hijo, gracias por amarme como nadie, gracias por ayudarme a vivir, gracias por ser un perrito feliz hasta el final, volvé, en la forma que quieras, pero volvé", cerró Marianella.