Gran Hermano (Telefe) entró en una instancia de definición y faltando pocas semanas para la gran final, Santiago del Moro anticipó un drástico cambio en el reality. El anuncio, que se dio por medio del teléfono rojo, sorprendió a los jugadores y modificó las reglas del juego de cara a la final, marcando un precedente en la historia del programa.
En una noche de tensiones a flor de piel, Santiago del Moro anunció un llamado del teléfono rojo "único". Nicolás, del grupo de los "Bros" (que tiene con Martín y Bautista) atendió y se ganó un asado para él y dos personas más. "Lo que pase ahí no va a ser visto como un complot", afirmó Del Moro felicitando a Nicolás y avisándole que podría subir a una persona a la placa. Para la comida, Nicolás eligió a Martín y Bautista y el trío se mostró feliz con su hazaña. Pero Gran Hermano les tendió una trampa que ninguno de los participantes restantes se imaginaba.
"El beneficio es de ustedes y van a comer asado también. Ellos van a complotar y ustedes los van a ver. Disfruten", anunció la voz en off de Gran Hermano a los participantes que no fueron seleccionados por Nicolás, que aprovecharon el momento para conocer los planes de sus compañeros. "Vamos a hablar por fin de lo que no podíamos hablar", indicó Nico, provocando las risas de los "hermanitos" que quedaron afuera del exclusivo asado. "Vamos a la guerra con Manzana", sumó Martín. "Lo mandaría con la fulminante a Manzana", profundizó Nicolás.
Con el juego de los "Bros" ventilado, participantes del afuera como Furia, Emma, Manzana y Darío se mostraron preocupados e indignados por algunas declaraciones que fueron arrojadas al aire. Flor, la novia de Nicolás en Gran Hermano, también fue una de las perjudicadas por el plan de dos de los tres (Bautista y Martín) de mandarla a placa.
Los planes contra los "Bros" y su complot
Santiago Del Moro visitó a los participantes congregados en el living y entre asado y chismes por el video de los "Bros" y su complot frustrado, les preguntó qué harán con la información VIP que recibieron. "No vamos a decir nada", dijo Emma. "Que el asado vino en beneficio para toda la casa", agregó Darío.
"Aunque se sientan perdedores en esta salieron ganando. Ellos terminan siendo vencedores, vencidos. La información la tienen ustedes", cerró Del Moro, en tono picante.