Luciano Castro habló tras la fuerte polémica que protagonizó al aire en el programa de televisión de Paraguay La Mañana de Unicanal, conducido por Dallys Ferreira, Dora Ceria y Jorge Riveros. Luego de que Dora le tocara los músculos de los brazos al momento de saludarlo, el actor reaccionó de una manera inesperada. El clip se viralizó y generó todo tipo de comentarios en las redes sociales, y tras esta situación, Luciano rompió el silencio.
Todo comenzó cuando Cora presentó a Castro y le halagó los bíceps mientras tocó su hombro con la punta de los dedos. "Es de verdad, señoras, es de verdad", comentó, entre risas. "¿Estás acostumbrado?", le preguntó la otra conductora, a lo que el artista respondió, con un visible gesto de incomodidad: "Lamentablemente, sí. No me molesta, pero si yo lo hago al revés, tengo una demanda. Si yo te hago '¿a ver si es de verdad?', vamos todos presos".
"A mí no me molesta porque yo me sienta prostituido por eso, me molesta la desigualdad", sumó Castro. Mientras algunas usuarias de las redes sociales le dieron la razón, la gran mayoría opinó que sus dichos fueron desafortunados y que incluso fueron una falta de respeto hacia las mujeres por haber minimizado la violencia de género que sufren día a día. Más tarde, Maite Peñoñori conversó con Castro y contó detalles sobre la charla que tuvieron.
"Luciano se quedó muy amargado con que se haya viralizado solo ese momento. Luego me dijo ‘yo entiendo que soy un mal llevado, que siempre contesto mal, pero en este caso puntual no fue para incomodar’", relató la panelista de LAM (América TV). Y agregó que a pesar de su incomodidad, las conductoras lo escucharon y "se pudo dar una charla muy copada".
"De verdad eh. Se pudo dar una charla muy linda. No se hicieron los tontos en el programa, como que tomaron el guante y trataron el tema", habrían sido las palabras que Castro le comentó a Maite sobre aquella conversación. "Lo escuché a Luciano en otra nota que dio después y dijo que le molesta que las chicas le toquen las tetas y los abdominales cada vez que lo ven y él se pone incómodo", sumó Ángel de Brito. "Es verdad, pero él me planteó que fue un buen disparador para tener una charla sobre los estereotipos y que lo pueden cosificar, y que si hiciera un comentario al revés sería repudiado", cerró la "angelita".