Jessica "Osito" Gómez es uno de los personajes más recordados de Gran Hermano en Argentina por el carisma que desplegó en su edición y por la canción El Beso del Osito, alusiva a su noviazgo dentro de la casa, que se convirtió en un hit musical en 2007. La exhermanita habló con El Destape Web sobre la actual edición del reality, contó su experiencia y reveló cómo sigue su relación con sus compañeros.
¿Cómo ves esta edición de Gran Hermano? ¿Qué diferencias notás respecto de la que vos fuiste parte?
- La veo bastante contemporánea a cómo estamos en la actualidad a nivel social y, sobre todo, siento que se está dando como el algoritmo de las redes, que va muy rápido todo. La diferencia que noto es que de repente el que es favorito hoy, mañana ya no lo es y la semana que viene a lo mejor están a punto de expulsarlo. El reality tiene una velocidad que hace cambiar todo muy rápido.
Los que tienen menor edad tienen otra visión del juego, que también tiene que ver con todo esto de las redes sociales. Ya entraron con otro chip, creyendo algunos tener más claras ciertas cuestiones y de repente encontrarse con que, por más que lleves determinados planes, la casa te come. El único ganador de la casa es Gran Hermano, algo que los jugadores no tenemos en claro. Es el que se lleva la plata, el que te expone, el que muestra tus miserias, con tu consentimiento, por supuesto, porque nadie te obliga a entrar. Cuando hay una elección, no hay queja alguna.
Pasaron 15 años de mi edición y éramos otros como sociedad en ese momento: no existían las redes sociales. Algunos de estos pibes ya eran conocidos en redes y de cierta forma ese mundo es un poco un Gran Hermano gigantesco, donde vos exponés tu vida, elegís mostrarte.
¿Volverías a entrar si tuvieras la opción?
- Uno siempre vuelve a los lugares donde alguna vez fue feliz, dice el dicho. Así que yo siempre volvería porque fui muy feliz. Hoy tengo un poco más en claro el juego, así que sí, volvería. Tendría que ver a título de qué entraría, si como jugadora o como qué.
¿En esta edición tenés algún favorito, estás del lado de algún grupo?
- Siempre estoy del lado de las personas que van a divertirse, a jugar, pero porque tiene que ver con mi paso por el reality. Creo que es más por el lado de Juli Poggio, su famoso #FueraMalasVibras, ese lado descontracturado, de la amistad, de la armonía. Por ese lado me inclino mucho más, porque el que se enoja pierde en el reality, como en la vida. Me gusta Juli, se la ve disfrutar.
¿Qué pensás de las críticas que hubo al casting por la poca diversidad de cuerpos y sexual? Además de los comentarios discriminatorios que dijeron algunos participantes.
- Escuché una nota que le hicieron a Flor de la V y dijeron que es el Gran Hermano más hegemónico y discriminatorio de todos. Yo no creo que sea así. No me parece que todos los cuerpos de la casa sean hegemónicos, hay cuerpos no tan hegemónicos. Veo que hoy la lupa de la sociedad está más puesta en un montón de temas sensibles y por eso se visibilizan. Si nos remontamos a ediciones anteriores, a la mía, también estaba la gordofobia, el bullying, pero como no se tocaba en la sociedad, no se hablaba.
Para mí lo que está pasando está buenísimo porque cuando algo es visible vos podés hablar, pero estaría mucho mejor que se armen debates no para matar a la gente que está adentro, sino para llevarles herramientas a un montón de personas que todavía les falta deconstruirse. Me parece que es una oportunidad para unirnos como sociedad. Pero garpa más la desunión, el pegarle al programa que está funcionando.
¿Ves a algún participante como posible ganador?
- Todavía no, por esto de que va tan rápido y va cambiando todo el tiempo. Por ahí veo que Alfa puede llegar a la final por la diferencia de edad que tiene y lo rico que es escucharlo a veces.
¿Cómo ves a Santiago del Moro en la conducción respecto de Rial, el conductor de tu edición?
- Rial me parece un conductor maravilloso, tenía el timing del quilombo, por dónde ir con la sensibilidad. Jorge es más visceral que Santiago, que es hasta más correcto, tiene ciertos modismos. A ver, Gran Hermano es un monstruo para conducir, es muy rico el formato y por eso muchos conductores lo quieren hacer. Pero hay que saber llevarlo, tiene tiempos, arcos dramáticos, tiene muchísimo en juego si le sabés sacar el jugo como conductor. Solita aportaba desde su espontaneidad, su emocionalidad, su actriz; pero Jorge para mí era un crack haciéndolo, más que todos los que estuvieron en ese lugar.
Cuando vos estabas en GH se hizo muy famosa la canción El Beso del Osito, por su noviazgo con Jonatan, tu compañero de reality. ¿Después de salir de la casa siguieron en pareja?
- Estuvimos un año más pero era más que nada por costumbre, porque nos llevábamos bien. No prosperó la relación pero somos amigos. Él se fue a vivir a España.
Eran muy chicos aparte, ¿no?
- Sí, teníamos 21.
¿Y con tus compañeros se siguieron viendo?
- Sí, con la mayoría sí. De hecho, estamos haciendo radio ahora con Nadia Epstein y Sebastián Pollastro en la radio de APTRA todos los lunes. Con el resto también, Griselda Sánchez es como mi hermana. El reality me dejó muchos amigos: Damián, Agustín, Juan, la mayoría te podría decir. Somos muy amigos, nos juntamos, tenemos un chat donde seguimos hablando. Pasa que es un formato que te marca muchísimo, una experiencia única que solo los que pasamos por ahí podemos entender y cada vez que nos reunimos parece que el tiempo se detuviera en aquel 2007. Interactuamos desde ahí y es hasta patológico si se quiere (risas), es muy intenso.
En su momento vos estabas en el grupo de Nadia y Sebastián era más amigo de Marianela, ¿no?
- Claro, Seba también estaba en el grupo de Nadia pero después se fue más con Male cuando Nadia salió.
¿Esas enemistades dentro de los grupos se diluyeron cuando salieron de la casa? ¿Cómo es la relación con Marianela ahora?
- No, hay cosas que pasan adentro que uno no puede sostener ninguna careta, ningún personaje. En la casa interactuás y te relacionás como en tu vida. Hay gente con la que no tenés buena onda y eso sigue. Todos los vínculos siguieron como estaban adentro de la casa, la mayoría. Sebastián sí sigue teniendo relación con Marianela, como en la casa, pero el resto casi que no.
¿Cómo vivieron internamente que Marianela resultara la ganadora?
- Fue como una tristeza. Mi favorito era Diego (Leonardi), que después entró a GH Famosos y ganó. Dio como bronca porque si bien fue buena jugadora adentro los sentimientos están a flor de piel y uno decía “No, pero no se lo merece, no fue buena compañera”. Pero bueno, no es un viaje de egresados, fue a jugar, ganó y está perfecto. Entender eso fue un proceso también.
¿Cómo es tu vida ahora, 15 años después del reality?
- Actualmente estoy trabajando con el papá de mi hijo, Santiago Domínguez. Soy su productora, él es humorista desde hace 25 años. Estoy estudiando Psicología en la UBA, soy mamá de un nene de 7 años, estoy ensayando para una obra en el Cultural San Martín el año que viene. Tengo muchas ganas de volver a trabajar en los medios y por eso me estoy formando también. Es un lugar donde nunca dejé de trabajar, porque siempre estuve delante o detrás de cámara, es un lugar al que quiero volver y quedarme.