La destacada actriz Mirta Busnelli, que volvió al teatro con la comedia Nada que no quieras en el teatro Picadero, fue invitada a un programa de televisión y mantuvo un fulminante cruce con Ronnie Arias por una pregunta que interpretó como un intento de humillación al aire. "No me parece", aseveró Busnelli generando un clima de tensión en el estudio de El Trece.
Invitada a Poco Correctos (El Trece) Busnelli presentó la obra que protagoniza los domingos junto a Miriam Odorico, Inda Lavalle y Mónica Raiola, y se sometió a la pregunta "poco correcta", el segmento del magazine en el que Ronnie Arias irrumpe con una consulta chispeante. “Yo sabía que tenía que pagar un precio...”, soltó en tono ácido la actriz, antes de la intervención del periodista.
“Mirta, una mujer hermosa, enérgica, con una carrera impresionante, hasta hippie creo que fuiste... a tu edad, ¿hay sexo duro?”, arremetió Ronnie, sin filtro. De inmediato, la sonrisa de Mirta Busnelli mutó a una mirada pétrea y respondió, seca: “No hablo de mi vida privada”. La tensión en el estudio se percibió durante algunos segundos en los que Ronnie trató de sacarle alguna declaración a la actriz y esta se mostró firme en su postura. “Yo lo aclaré cuando me llamaron. Aparte una cosa así, de sexo duro, no me parece...”, agregó Mirta.
Cuando Ronnie ya daba el segmento como perdido, Busnelli soltó: “Aparte vos sabés que a esa edad el sexo más bien es sexo blando”. Las risas emergieron en el magazine y los conductores respiraron aliviados tras el salvavidas de la actriz, que se mostró disgustada con la pregunta de Ronnie Arias. “¡Cómo transpiré!”, soltó "El Chino" Leunis. “Unas ganas de renunciar”, bromeó "El Pollo" Álvarez, su compañero en la conducción.
De qué trata Nada que no quieras, la nueva obra protagonizada por Mirta Busnelli
Nada que no quieras es la historia de cuatro mujeres que han naturalizado la infelicidad. Emilia acaba de jubilarse. Ambiciona disfrutar la última etapa de su vida con la tranquilidad de haber cumplido con todo lo que debe cumplir una buena profesional, una buena madre y una buena esposa. Sin embargo, la inesperada visita de su hermana Nora -que regresa sorpresivamente de un tratamiento de rehabilitación que la obligó permanecer internada durante mucho tiempo-, la de su hija Brenda -buscando amparo y contención para sobrellevar el duro impacto de una infidelidad que se reitera-, y la de su mejor amiga Diana -víctima de un hecho delictivo que la sorprendió en la tranquilidad de su hogar-, la enfrentará a una realidad, a la que supo resistirse. "La obra expone las miserias de cuatro mujeres, al punto de poner en descubierto la sordidez de cada una de sus almas. Elige el camino de la comicidad para llevarlas casi al extremo del absurdo confirmando que la risa es un apropiado mecanismo de defensa que nos permite sobrellevar nuestras propias desgracias", señala un comunicado de prensa.