Maju Lozano vivió un momento de bronca y tensión en medio de su programa Todas las Tardes cuando de forma inesperada perdió la compostura y estalló en contra de la producción de El Nueve.
En varias ocasiones del magazine de las tardes, la conductora y su equipo sufrieron cortes de luz que lejos estuvieron de ayudar al clima de trabajo. Con humor irónico, Maju sorteó los obstáculos como pudo hasta que en un momento se sintió sobrepasada por la situación y optó por reaccionar con quejas en vivo.
La gota que colmó el vaso fue la interferencia en el audio que se escuchaba en algunas entrevistas. Maju, finalmente, sentenció: “¡Hoy es un despelote! ¡Está difícil!” Y luego, como hablándole “a los espíritus”, expresó: “¡Che, es una hora y media que tienen que dejar de joder!”.
Ya cansada por las interferencias y los abruptos cortes de luz Maju denunció, entre risas, que el aire acondicionado estaba muy fuerte. “¡Estamos fresquitas! ¡Los piecitos ya no los siento! Porque no anda la luz ¡Pero el aire acondicionado para chuparse los dedos! Quince grados bajo cero ¡Ahora sé lo que sienten las modelos cuando las llevaban en culo a sacarse fotos en la nieve! ¡Y déjense de embromar chicos, yo no me voy a ir de este programa!”, cerró, picante.
El mal momento que vivió Maju Lozano: “No me interesa vestir gordas”
La conductora de televisión Maju Lozano se expresó recientemente sobre la Ley de Talles y relató una discriminatoria situación que vivió hace poco tiempo, con la dueña de una marca de ropa. La celebridad hizo hincapié en cuán poco se aplica la legislación que obliga a todas las empresas de indumentaria a ofrecer mercadería para todo tipo de cuerpos.
“Los talles que hay por lo general en los negocios de mujeres no tienen nada de parecido a lo real, a lo mejor vos vas a una marca y sos M y después vas a otra, y sos L o XL”, comenzó su descargo la humorista en Todas las Tardes y así evidenció una problemática que sufre una gran parte de la población, basada en la manipulación de los talles por parte de las empresas para continuar con la hegemonización de los físicos.
Lozano hizo alusión a una conversación que tuvo con una empresaria, quien le hizo notar su gordofobia. “Una vez la dueña de una marca muy famosa de acá me dijo ‘a mí no me interesa vestir gordas’. Tiene que ver con eso, necesitan que su ropa luzca de una determinada manera, con determinado físico y clase social”, relató la exconductora de Vértigo y de ese modo visibilizó que no es casual que la mayoría de las prendas de vestir estén destinadas solo a un tipo de cuerpo.
“De todas formas está cambiando muchísimo, ahora hay modelos de talles grandes”, lanzó luego la panelista Nequi Galotti, en defensa de los supuestos avances de la industria de la indumentaria en materia de diversidad de cuerpos, y la conductora disintió: “Falta muchísimo. Aspiran a que una mujer de 50 años acceda a esa ropa pero la modelo pesa 20 kilos y tiene 20 años”.