Lizardo Ponce se abrió en PH, Podemos Hablar, el programa conducido por Andy Kusnetzoff, sobre la vez en la que les contó a su mamá y a su papá sobre su homosexualidad diez años atrás, cuando tenía 21 años. El momento emocionó a todos, en especial, a Sandra Mihanovich, que aunque es 33 años mayor que él entiende que es un proceso bastante complejo de atravesar incluso hasta el día de hoy.
Hablando de sus padres, Lizardo explicó que ellos lo ayudaron a aceptarse tal cual es, diez años atrás, cuando tuvo que contarles por primera vez que era gay. “¿Córdoba es un lugar medio cerrado?”, le preguntó Andy. “Sí… creo que es medio difícil, porque más allá de que las cosas van evolucionando, sigue siendo común. Es un proceso sumamente injusto. A mí me tocó atravesarlo y es una etapa muy difícil en la que uno bloquea situaciones y se siente muy mal”, expresó el influencer.
“Yo viví esa etapa de mi vida en la que tuve que resguardarme y no poder compartirlo con nadie, que también es muy triste”, agregó. “Me gusta que cuentes esto, porque se avanzó tanto en los derechos y todo que uno dice: ‘Ah, pero vos, que sos mucho más chico, ¿igual también te cuesta?’. Porque cuesta, más allá de los derechos desde el Estado, en las familias, culturalmente, sigue costando un montón”, remarcó el conductor.
“Sí. Más que nada porque está eso de que uno lo tiene que decir, que lo tiene que contar. Si sos gay, lo tenés que hablar, pero si sos heterosexual no. Me resultaba muy injusto tener que sentarme a contar algo que nadie vino y se sentó a contármelo a mí. Me costaba también por no saber cómo lo iban a tomar. Sabiendo que contaba con todo su amor y su apoyo, el miedo por ahí estaba. Tenía miedo de que lo sufran, no porque yo sea gay, sino por la mirada de los demás, por lo que podían pensar los otros. Me pasaba eso”, continuó Ponce.
Como no se animaba a tener esa conversación con sus papás y sus hermanos, su psicóloga de aquel entonces le propuso invitar, primero a sus papás y después a sus hermanos, a hablar en la sesión. “Al principio hablamos de cualquier cosa, nos puteamos por cosas del día a día, y cuando quedaban cinco minutos, antes de terminar, me da el pase mi psicóloga para ver si yo quería decir algo. Me acuerdo hasta el día de hoy que ni siquiera me salió decir la frase, yo le dije: ‘Me gustan otras cosas’, que fue la frase que me salió en el momento”, recordó, entre risas.
La respuesta del papá de Lizardo Ponce cuando le contó que era gay
“Lo entendieron. Se largaron a llorar, se emocionaron mucho. Pero por suerte tuve unas palabras de mi papá que me guardé en el corazón y hasta el día de hoy: que no era un tema, que no era nada que me distinga de los demás, que si para alguien eso era un tema, esa persona no tenía que estar en mi vida directamente y que siga mi camino”, dijo, emocionado. “Que eso no significa nada porque no tiene que ver con cómo es uno como persona. Así que me quedé con eso y esquivé a la gente que no estaba de acuerdo con cómo soy”, cerró Lizardo al recordar ese momento.
“Eso se lo agradezco siempre, porque fue sacarme una gran mochila de encima que tenía injustamente y que mucha gente la tiene. Fue un gran proceso y me sentí libre de verdad y dejé de bloquear tantas cosas y mentir. El amor de toda mi familia me impulsó a que pueda ser quién soy y a dejarme vivir libremente”, cerró el influencer.