Leonardo Sbaraglia se sumó a la larga lista de artistas críticos del recorte a la cultura impulsado por el presidente Javier Milei. El actor participó de la marcha en la puerta del Gaumont que la Policía de la Ciudad dispersó con gases lacrimógenos y hasta el momento dejó tres detenidos.
"Yo estaba acá, no había ningún problema ni ninguna violencia y de pronto llegó la policía. Nos volvió a poner en la vereda y creo que tiraron gases por allá", contó Sbaraglia. "Fíjate lo que es esto. Toda gente manifestándose en relación a algo que se está defendiendo, que es el cine argentino", dijo ante las cámaras de televisión.
"Y un lugar emblemático (en referencia al cine Gaumont), que ha defendido y ha protegido al cine argentino. Y donde se estrenan películas que no se pueden estrenar en otro lado", remarcó el respetado artista. "Se defiende un cine que no el mercado de las exhibidoras y las distribuidoras no lo pueden defender. Y con todo derecho, no tengo ningún problema con eso", añadió.
La protesta fue la reacción a la oficialización que hizo el Gobierno esta semana al centenar de despidos en el INCAA y el desfinanciamiento del cine argentino. "Uno está defendiendo acá un tipo de cine, que con todos estos recortes, muy probablemente no va a existir más", resaltó Sbaraglia.
Uno de los cronista le consultó al actor si había alguien beneficiado por el cierre del INCAA y el protagonista de películas como Relatos Salvajes fue contundente: "No lo sé, papá porque no estoy metido en la movida. Yo estoy acá como un ciudadano más, ni siquiera como un laburante de 40 años. Estoy acá como un ser humano más que le encanta el cine argentino".
En cuanto al gran despliegue policial, Leo Sbaraglia quedó sorprendido. "Hacen un operativo como su tuviéramos con fusiles y no tengo nada", subrayó. De acuerdo a lo confirmado por la Policía de la Ciudad, hay tres personas detenidas.
Luego, el actor se refirió a los motivos de la ofensiva de Milei contra la cultura y recordó que la industria se pronunció antes del ballotage. "Son las promesas que hizo en campaña. Por eso el cine argentino unido en San Sebastián, que a mi me tocó estar allá, nos hicimos una foto todos juntos", rememoró Leo y agregó: "Las 50 personas que estábamos representado al país de nuestro presidente. Yo creo que él tendría que estar orgulloso del cine que tenemos en nuestro país. Además, es una industria pujante y potente respetada en todo el mundo".
También apoyó los dichos de Axel Kuschevatzky durante la entrega de los premios Óscars del último fin de semana. "Acá la discusión ni siquiera es cultural. Están dejando morir una industria que funciona y tiene un gran mercado a lo largo y a lo ancho de todo el mundo. Tendríamos que tener orgullo porque es parte de nuestra bandera"; afirmó Sbaraglia.
Sobre el final de la entrevista, el actor aún estaba impactado por el accionar policial y ensayó una explicación sobre la actitud del Gobierno. "La violencia engendra violencia. ¿Por qué tanta violencia? No lo puedo explicar porque no quiero que la violencia que hay del otro lado uno la devuelva. A veces no queda otra que parar el golpe. Estamos tratando de parar el golpe y que no nos aplasten", sentenció.
Tensión en el Gaumont: la policía avanza sobre una marcha en defensa de la cultura nacional
Organizaciones sindicales de trabajadoras y trabajadoras del Incaa, documentalistas, artistas y actores se manifestaban en las puertas del histórico Cine Gaumont, en inmediaciones del Congreso de la Nación, para denunciar recortes en el sector y protestar contra la privatización cuando efectivos de la Policía de la Ciudad llegaron en motos y a pie para dispersar y tirar gases lacrimógenos. "Sabemos que hay una persona herida y tiraron gases", denunció una joven integrante de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE- Incaa) ante C5N. El INCAA -cuyo desfinanciamiento fue anunciado esta semana- depende de la Secretaría de Cultura, bajo la órbita del Ministerio de Capital Humano, tiene 645 empleados y unos 500 son de planta permanente.
La joven, quien formó parte de la conferencia de prensa, explicó que están allí para "denunciar la situación de vaciamiento del cine nacional". "Estábamos difundiendo las películas que se estrenan hoy y esto que está sucediendo es repudiable, porque quieren disciplinar la calle de esta manera, meten palos a estudiantes, trabajadores, directores, diputados nacionales, dirigentes sindicales, es repudiable que suceda esto en este contexto, mientras siguen tratando el DNU (70/2023, que el Senado rechazó) que lo único que viene hacer es arrasar con lo que queda en nuestro país", advirtió. Entre las personalidades del ambiente se encontraban la actriz Mirta Busnelli y los actores Leonardo Sbaraglia y Osmar Núñez, que también es director.
Durante la conferencia de prensa que se realizó antes de que llegaran los efectivos policiales, llamaron a defender los puestos de trabajo del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) y las políticas de fomento de esa industria.
Allí, se pronunciaron contra "los despidos y el ataque al INCAA, en defensa de los festivales federales, los espacios INCAA (como el Gaumont) y las escuelas de cine y la continuidad de la señal televisiva y la plataforma Cine.ar". La iniciativa se concretó luego de la resolución firmada por el presidente del INCAA, Juan Carlos Pirovano, que dispuso dar de baja todos los contratos que se vencían el 31 de marzo de este año, la asignación y el pago en concepto de horas extras, la reducción del servicio de seguridad, así como de transporte, combustible, estacionamiento, comida, y/o cualquier otro gasto de representación institucional.
"El ataque al cine nacional es ideológico no resuelve ni el hambre ni la pobreza y deja sin trabajo a más de 600 mil familias que dependen de la industria", denunciaron desde Cine Argentino Unido. A su turno, Teresa Saporiti, de DOCA, explicó ante las y los presentes que los documentales "no pueden medirse en términos del capitalismo (N de R: como propone hacer el Gobierno argentino, encabezado por Javier Milei), porque muchas veces ese ven en espacios que no cobran entradas, como escuelas, unidades básicas, centros culturales", dijo.
"Esta gente quiere atacar la cultura, nuestra soberanía, no quieren que podamos contar con nuestra propia industria. En el Incaa no sobran trabajadores, en Télam se cuentan historias con la mirada del pueblo, quieren vender también Aerolíneas Argentinas, quieren entregar la soberanía de nuestra cultura, de nuestros relatos. de nuestros cielos y nosotros vamos a defenderla", soltó Saporiti.