El periodista Sergio Lapegüe se expresó sobre un duro momento que atraviesa por la salud de su madre y sobre el rol que ocupa su esposa, Bochi, en esa situación. En un desgarrador descargo, el conductor de televisión se refirió con lujo de detalles a los duros sentimientos que supone acompañar a un allegado con Alzheimer.
“Mamá es la primera palabra que pronunciamos y la que decimos cuando estamos mal. Es, de alguna manera, una palabra salvadora. Detrás de esas cuatro letras está ese corazón infinito que solo las madres tienen. Alguna vez les conté sobre la mía, Elba, que lo es todo. De ella sólo recibí afecto. Fue la mujer que primero me cuidó y la que nunca me soltó las manos”, comenzó su descargo Lapegüe.
El presentador continuó su discurso en alusión a las enseñanzas que le dejó su progenitora: “Ella me enseñó que ser madre es cuidar incondicionalmente de los hijos, no importa la edad. Y siempre le voy a estar agradecido. Recuerdo cuando me daba la mano para cruzar la calle y no me la soltaba mientras íbamos a hacer las compras. Ahora estoy seguro de que cuando le doy la mano, aunque no lo pueda demostrar, sabe quién soy. Su mirada perdida me da paz. Así seguimos. De la mano. Yo tampoco voy a soltarla”.
Las tiernas palabras de Sergio Lapegüe sobre su esposa, Bochi
Por otro lado, Lapegüe se refirió a cuánto significa su esposa en su vida y cuán estrecho es su vínculo. “La otra mujer de mi vida, la que elegí hace más de 30 años y me llenó de alegría para siempre siendo madre de mis hijos, es Bochi. Debo reconocer que aprendo viéndola. Silvia es y será la mamá protectora que suelta cuando tiene que soltar. Que ayuda cuando tiene que ayudar. Que deja que sus hijos aprendan de sus errores. Que enseña, acompaña, reta, abraza, se enoja y perdona”.
“Bochi es la que se banca mis locuras y la que muchas veces cumple con dos funciones -de mamá y papá- por mi ausencia forzada y mi comodidad. Es la que pasó tantas noches sin dormir cuando Mica o Elvis llegaban tarde de alguna salida nocturna. Siempre la voy a encontrar con una sonrisa, a pesar de todos los problemas”, sumó en alusión a su esposa y cerró: “Es la mamá que todo lo puede. Y si no lo puede, por lo menos lo intenta. Es el centro de nuestro universo. En cada lugar, en cada situación, en cada oportunidad que disfrutamos nuestra familia, pienso que todo es posible gracias a ella”.