Darío Barassi quedó sorprendido por una respuesta recibida en 100 Argentinos Dicen, programa que conduce de lunes a viernes a las 18.30 horas por El Trece. El juego involucró la participación de toda la familia y cuando llegó el turno de una de las integrantes, se quedó boquiabierto.
La familia Schulein debía contestar a la pregunta de "¿Qué problema puede generarte dormir abrazado?". Pegar patadas y dormir incómodo fueron las respuestas otorgadas, pero cuando llegó la tercera, Barassi empezó a mirar incómodo a todo el mundo.
"Erecciones", lanzó Cande, una de las participantes. Al conductor le cambió la cara y todos se lo tomaron con gracia, ya sea por parte de otros concursantes como la producción del programa. "¿Qué? Por ahí el chico es muy atrevido", agregó entre risas.
Barassi siguió con su mirada descolocada y después de unos segundos sin decir nada expresó: "¿Vamos a tomarlo con naturalidad esto, chicos?". Al mismo tiempo bromeó y le hizo un chiste sobre su altura y juventud: "¿Una pequeña de 1,50 que acaba de decir 'erecciones' en mi programa?"
El juego continuó y el capitán, Fede, tuvo que decidir por una de las tres opciones. Finalmente optó por "pegar patadas", decisión que apoyó Barassi porque "de las tres era la que más me gustaba", pero no fue la respuesta correcta.
El calvario de Darío Barassi en 100 argentinos dicen
En la transmisión del pasado lunes 23 de mayo, Barassi inició el programa de una manera muy particular. A diferencia de lo que suele hacer en cada comienzo del ciclo, el sanjuanino se mostró con poca euforia y trató de esconderse en una de las columnas del estudio. Mientras tanto, los integrantes de la producción le gritaban "¡que salga, que salga!".
El presentador dio unos pasos hacia adelante y, al empezar a hablar, se le notó un radical cambio en su voz. Consciente de que se encontraba disfónico, explicó: "¿Vieron que ustedes están diciendo 'que salga'? Bueno, anoche salí. Te juro que me siento un adolescente. Me vi obligado. Era el día que recibía a los papis del colegio en casa. Y para no pagar nada, armé una situación en un bolichito".
"Fui con todos los papis y no tenía alternativa. Una cosa llevó a la otra, hay unos que son unos borrachos y tendrían que internarse... y me dejé llevar. Miré el reloj y eran las 4 de la mañana, yo estaba a los gritos", agregó Barassi, que se mostró con muchas dificultades para hablar.
Antes de presentar a las familias de 100 argentinos dicen, Darío le advirtió a los televidentes: "Hoy el programa va a ser así. Seguramente mañana también hasta que el señor grande se acostumbre a lo que está pasando. No lo puedo creer..." En tanto, aclaró qué es lo que deberá hacer para poder conducir: "Ya pedí el megáfono para poder dirigir. Todos se calman así que no me hagan gritar".