Nazarena Vélez reveló que se encuentra en una difícil encrucijada por su futuro económico y pronto deberá tomar decisiones al respecto. La productora teatral se expresó sobre el futuro de su obra y también habló de las deudas que le quedaron tras el suicidio de su esposo, muchas de las cuales aún no pudo resolver.
La madre de Barbie Vélez se refirió a cuán difícil le resulta llevar su obra de teatro Trepadores, protagonizada por Rodrigo Noya, Federico Barón, Santiago Caamaño y Bautista Lena, a una plaza teatral como la de Mar del Plata. “Es un grupo hermoso y que les está yendo muy bien. Quería llevarlos a Mar del Plata y después sacarlos a girar, pero es imposible para una productora como yo, que no tengo un respaldo económico”, comenzó su descargo Vélez, en diálogo con Susana Roccasalvo.
“Los alquileres se hacen muy difíciles. Lo tengo ahí a Fede Barón que acaba de ser papá, Rodrigo Noya lo mismo. Mínimo los tengo que mandar a un dos ambientes. Yo quiero que ellos lo pasen bien, me pongo en su lugar, porque siempre estuve como actriz. Me gusta tratarlos bien y siempre me caractericé como productora por darle lo mejor que puedo a mis actores. Pero me es imposible ahora”, lanzó Vélez sobre el momento que atraviesa como productora.
Nazarena Vélez sobre sus problemas con las anfetaminas
Hace algunos días, Nazarena Vélez se explayó sobre cómo pudo dejar atrás su consumo de anfetaminas, droga que utilizaba para bajar de peso. “Sufrí mucho, yo soy una mina a la que le gustó sufrir se ve. Más allá de todo lo que me pasó, me veía un poquito más gorda y sufría. Todo era como un sufrimiento, creo que nos criaron para los sacrificios, toda una presión social”, comenzó.
“Hoy que tengo una apertura en mi cabeza más copada, está bueno que lo cuente. Yo fui una mina Photoshop y eso a las mujeres nos destruye la cabeza… nos destruye ver una cola increíble, todas queremos ser Sol Pérez. Sol cuenta que se mata en el gimnasio, yo era Photoshop, era mentira”, siguió la celebridad y cerró: “Decidí dejar de sufrir, estaba en víctima, que me quedaba cómoda. Hace tres años dije ya está. Nos quedamos en esa angustia, en esa oscuridad, que es tremenda. De verdad después que pasó lo de Fabián quedé sumergida en una oscuridad tan fuerte”.