El periodista Jonatan Viale se expresó sobre la viralizada foto del festejo que el presidente Alberto Fernández protagonizó en la Quinta de Olivos en julio del año pasado. Fiel a su estilo, el conductor de La Nación + se exaltó y lanzó dardos para todos lados, como reacción ante la imagen que circula en internet desde hace días y muestra al mandatario, su esposa y un grupo de allegados en una cena.
“No sabés el dolor que genera esta foto. A mí me da tristeza. No se olviden de que no había velatorios y esta gente en la cara te lo ponen. Es recontra doloroso. Hay bronca, desazón, angustia y dolor. Primero la impunidad: yo soy un rey. Me importa un bledo todo. Estado soy yo. Primero es ‘no me importás, no me importa nada’. ¡Ni un barbijo en la mesa! No están”, comenzó su discurso el hijo de Mauro Viale.
Luego, el periodista macrista continuó su descargo e invalidó las restricciones puestas por el coronavirus, por el error cometido por el presidente. “Nos puteaban, nos decían de todo. Decían barbaridades. No hay un barbijo en la mesa. Nos decían de todo. Nos decían anti cuarentena. La pasamos mal. No hay manera de disfrazarla. Mentiroso. Encubrimiento se llama esto. ¿Barbijo? No veo por ningún lado ahí. Dylan muy educado”, lanzó.
“Un chico de 18, 19 años no puede ir presencialmente a la universidad. No consigue trabajo. No puede ir a recitales. No pudo juntarse con amigos todo el año pasado. No puede ir a la cancha. No puede ir a bailar. Y se dieron cuenta de que no había tales reuniones. Once personas de joda en la Quinta de Olivos mientras a vos te decían: ‘Asesino, loco, egoísta, cheto. Irradiás el virus”, sentenció por último el presentador de TV.
Llamó a la rebelión
En un otro peligroso discurso respecto al mismo tema, Viale sentenció que el pueblo debería rebelarse. “¿Quién tiene la culpa de todo? ¿El Gobierno? ¿El Presidente? Negativo, señores. La culpa de todo la tiene Fabiola. Poco hombre, poco caballero. Tirarle toda la porquería a tu pareja porque no tenés el coraje de hacerte cargo”, lanzó y continuó: “Yo creo que permitimos demasiado como sociedad. Creo, si me permiten, que llegó el momento de dejar de permitir ciertas cosas, de rebelarse ante tanto destrato. No nos merecemos más a esta porquería”, lanzó el periodista y así marcó una vez más su manera de ejercer su profesión, en la que incita a su público al odio.