Juana Repetto reveló en sus historias de Instagram el problema que enfrenta día a día en su casa y contó cómo trata d sobrellevarlo. La hija de Reina Reech y Nicolás Repetto se mostró algo molesta y cansada en su descargo.
"Venimos en una racha de que nos pasan un montón de cosas juntas. Se rompió un caño de gas de la casa actual que alquilo, ahí en la puerta justo donde está el medidor. Una pérdida bastante grande", comentó Repetto sobre el problema que afecta la dinámica familiar en su hogar.
Repetto aseguró que lo peor es que el gasista que acudió a su casa le informó que es probable que el servicio vuelva a funcionarle recién dentro de un mes. Por ese motivo, Repetto se tomó la situación con paciencia y decidió agradecer sus posibilidades: "Siempre agradezco. No tenemos agua caliente y nos podemos bañar en lo de mi vieja que está cerca. Tengo la bendición de tener aparatos para resolver la comida".
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"Lo que quería contar es que ayer estuvimos todo el día en este parador que es re lindo, los chicos tienen un sector para jugar todo, y le pedimos al chico una frapera con hielo porque nuestras bebidas estaban calientes. Y nos dijo: 'Dale, dale. No te puedo traer frapera pero te traigo un vaso'", comenzó su relato la actriz de teatro y televisión que es madre de Toribio y Belisario. "Y bueno, nos trajo un vasito que nos duró un pedo", agregó.
Repetto reveló que continuaron pidiéndole vasos de hielo al empleado durante toda la tarde, dada la poca cantidad de cubitos que traía cada uno. "Cuando nos llega la cuenta antes de irnos decía 1000 pesos en vasos de hielo. Un vaso, de un hielo y medio, lo cobraban 200 pesos. Todo bien, lo pago. De hecho, le ofrecimos pagarle la frapera, pero quiero saber qué opinan", continuó Juana. Además, aclaró que pidieron tostados y otras bebidas al lugar. "¿Da o es cualca?", remató.
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"Me di cuenta haciendo el taller de 7 elementos que, más allá de las consultas personales que yo tenía con el doc., que estoy aprendiendo y me está cebando mucho, de que lo que más me cuesta es instalar los hábitos que no tienen que ver con la alimentación", contó Juana en sus redes sociales. Y agregó: "Si bien a veces la alimentación cuesta porque estamos haciendo un plan de salud para que las células estén sanas y, en un principio, es bastante estricto y no le podés dar al cuerpo y a la células nada que les haga mal, que es casi todo lo que la industria nos quiere dar de comer. Me cuesta la de instalar los otros hábitos que hay que instalar a diario. Como por ejemplo, todos los días tener contacto con la tierra".