Bienvenidos a bordo, el programa que conduce Guido Kaczka por la pantalla de El Trece, siempre se destacó por la gran variedad de juegos que ofrece, entre los que destacan el canto, las dominadas e incluso lectura de labios, que generan un divertido clima en el estudio. Sin embargo, este miércoles se vivió un tenso momento cuando el conductor le jugó una broma a Hernán Drago, que derivó en un cruce entre ambos.
Todo comenzó cuando el presentador comparó el esmero que hacía Lorena Paola para que los participantes del segmento de lectura de labios lograran entender lo que decía. Cuando fue el turno de Drago, Kaczka detuvo el juego para referirse a la manera de ser del modelo y expresó que era un “remanso” y que “vivía en una nube de algodón”.
“Sos un tipo de buena intención”, aseguró Guido, y Hernán alcanzó a musitar un “muy”, mientras el conductor se acercaba cada vez más. “¿Sabés lo que sos vos?, insistió, acercando su mano a la barbilla de Drago, que ahí sí pareció perder la compostura. Se arqueó hacia atrás, evitando todo contacto y se puso firme. “No se toca, no se toca”, señaló el modelo, quitando enérgicamente la mano del conductor. Luego, le recitó los puntos de un contrato tácito entre ellos. “Vos podés decir lo que soy. Yo sé lo que soy”, enfatizó el modelo dando a entender que podía decir lo que quisiera, mientras no le tocara el rostro.
Pero Guido no entraba en razones. “Dejame que te lo haga, dale”, suplicó, pero tampoco tuvo suerte. “¿Hace falta tocar?”, preguntó Hernán, cada vez más serio. “¡Ojo, eh! ¿Qué soy?”, lo advirtió con palabras y gestos, cuando vio venir el segundo avance del conductor. Sin embargo, el actor no hizo caso y repitiendo la pregunta -“¿Sabés lo que sos?”- volvió a apuntar a la pera de su compañero. Y esta vez con más energía, volvió a correrlo.
“No me pongas la mano”, cerró Drago, con un gesto de fastidio y dando por terminado el asunto. “Bueno, te lo digo después, si no me dejás”, se retiró el conductor, a esa altura ya resignado y sin lograr su cometido. En cambio, apeló al latiguillo “preparados, listos, ya”, para marcar la clave para la continuidad del juego. Y allí, el que el tranquilo Hernán, en compañía de Antonella, no tuvo la suerte de la nerviosa Lorena, quien jugando con Ezequiel tuvieron 4 aciertos y se consagraron ganadores.