Gran Hermano tiene este miércoles los nuevos nominados para la segunda gala de eliminación. El próximo domingo 30 de octubre otro participante abandonará la casa del reality show emitido en Telefe.
Luego de pasar los 17 participantes por el confesionario, se conocen los resultados de las votaciones que catapultan a algunos integrantes de la casa a la placa de eliminación.
¿Quiénes son los nominados de Gran Hermano?
De acuerdo a la voluntad de los participantes de Gran Hermano, los nominados a abandonar la casa el próximo 30 de octubre son Juan, Nacho y Martina. Alexis quedó fuera de la placa de eliminación debido a que hubo complot de los tres primeros nominados para llevar al "Conejo" a instancias decisivas. En lugar de Alexis, y con 4 votos, Walter "Alfa" ingresó a la placa de nominación.
Gran Hermano: cuáles son las diferencias entre la nominación espontánea y la fulminante
A diferencia de los votos regulares que los jugadores hacen cada miércoles, en los que le dan 2 puntos uno de sus compañeros y 1 a otro, con la espontánea -que la pueden hacer el primer participante que pida su uso en el confesionario- se puede dar 3 y 2 votos, respectivamente. Y aunque no parece mucho, un solo punto puede hacer la diferencia a la hora de armar una placa de nominados.
Sin ir más lejos, uno de los casos más recordados es el de Marianela Mirra, quien cerca de la final de Gran Hermano 2007 usó este recurso contra Diego Leonardi, quien había sido su aliado y muchas veces protector dentro de la competencia. A pesar de que él no tenía sospechas de la tucumana, se enteró de su estrategia a raíz de un comentario que recibió desde el exterior de la casa. A partir de ese momento, "Male" se convirtió en una de las grandes revelaciones del juego.
En cambio, con la nominación fulminante no importa cuántos votos en total acumule la persona que la reciba, sino que irá directamente a placa. Aunque parece un arma potente dentro de la casa, en caso de que el destinatario de esta medida también reciba un buen número de votos de parte del resto de sus compañeros, no hace la diferencia. Por el contrario, queda desperdiciada la jugada.