Juliana se convirtió en la participante elegida por sus compañeros para volver a entrar en la casa de Gran Hermano. Sin embargo, un día después de su regreso, recibió una fuerte sanción por parte de la producción del reality al haber roto una regla fundamental.
Luego de haber empatado con tres votos a favor contra Daniela, Juliana volvió a entrar a la casa por decisión de Alexis "El Conejo", el líder de la semana. Pero unas horas después de entrar, la participante santafesina rompió una regla fundamental: contó detalles del exterior a sus compañeros. Esta regla tenía que cumplirse a rajatabla para que el aislamiento de los demás siga su curso, pero Juliana no lo hizo.
Por este motivo, en la jornada del jueves, Santiago Del Moro comunicó que la producción de Gran Hermano había decidido sancionar a Juliana. En este marco, el conductor leyó la sanción que estaba dentro del sobre rojo.
"Juliana no podrá participar de la prueba del líder de la próxima semana y queda automáticamente en placa. Tampoco podrá nominar a ningún compañero", comunicó Del Moro para finalizar la jornada.
El desconsolado llanto de Romina en Gran Hermano: "Necesitaba"
Romina Urigh vivió un emotivo momento al aire de Gran Hermano. La exdiputada no pudo contener las lágrimas y terminó por quebrarse en el confesionario ante un regalo muy especial que le dio la producción.
De cara a las fiestas de fin de año que pasarán los participantes dentro de la casa, y luego de pasar dos meses aislados de su familia y la sociedad, la producción del reality show decidió hacerles un regalo a los concursantes y les mostró un video de sus familiares. Cuando llegó el turno de Romina, ella no pudo contener el llanto y terminó por quebrarse incluso antes de ingresar al confesionario.
Luego de ver los saludos de sus familiares, que incluían mensajes de sus tres hijas, Romina le agradeció a la producción por este regalo entre lágrimas. "Gracias, muchas gracias. Esto me hace feliz, no sabés lo que lo necesitaba", aseguró Urigh entre sollozos ante las cámaras.