El nombre de Gisele Rimolo volvió a los titulares de los medios de comunicación. Las falsa médica alcanzó popularidad a mediados de la década de los noventa como pareja de Silvio Soldán promocionando su clínica estética en distintos programas de radio y televisión. Finalmente, la Justicia la condenó a 9 años de prisión por ejercicio ilegal de la medicina, adulteración de medicamentos y tráfico de medicamentos peligrosos para la salud, agravado por muerte.
En 2021, recibió el beneficio de la libertada condicional, se cambió de look y nombre, pues ahora se hace llamar Mónica Gaineduu. Es decir, utiliza su nombre de pila (Mónica Cristina María Rimolo) y el apellido de su esposo. Y según trascendió el año pasado, estaría trabajando en una clínica ubicada en la zona norte del conurbano bonaerense.
“Giselle Rímolo estaría yendo tres veces por semana a esta clínica, tendríamos chequeado el auto en el cual vendría, es de una marca francesa que ya no se fabrica más”, afirmó el movilero de A la tarde en una emisión del 2022. Pero el tema fue retomado este jueves y Luis Ventura sostuvo que "podría volver a la cárcel"
"Ante todo, quiero decir que a partir de varias cirugías plásticas ha cambiado radicalmente su formato facial. Ha oscurecido su pelo. Es otra persona", remarcó el periodista. "Justamente, en ese cambio físico también hay un cambio en su identidad: utiliza su verdadero nombre, que es Mónica, y el apellido es de su marido, el abogado Juan Carlos Gaineduu", completó.
"Hace tiempo asiste a un centro de estética en San Isidro, donde cambiaron radicalmente su físico. A partir de ahí, empezó a operar en un departamento de zona norte", sostuvo. A continuación, aclaró que "las puertas no están abiertas a los pacientes", sino que para poder ingresar hay que establecer un vínculo de certificación.
"Algunos dicen que Giselle Rímolo es la directora de un nuevo negocio que tiene que ver con la medicina. Otros dicen que en realidad cumple con algunas consultas de doctorado", relató y advirtió: "Lo que la podría poner en riesgo de volver a la cárcel si se comprueba que atiende como doctora y no que recibe pacientes como directora de una clínica".
El calvario de Giselle Rímolo al salir de prisión
Tras beneficiarse con la libertad condicional, trascendió que Rímolo quedó en la ruina, perdió su casa de Don Torcuato, y comenzó a sufrir ataques de pánico, por lo que le recomendaron que reciba tratamiento psiquiátrico. “Ella era dueña de una casa enorme en Don Torcuato, pero la puso a nombre de su expareja, Juan Gaineddu. La propiedad está abandonada: hay ratas, cucarachas, las paredes están sin pintar y la pileta no tiene mantenimiento", revelaron el año pasado en el programa Es por ahí.
“Cuando salió de prisión, un amigo le pagó un hotel en Palermo porque ella no tenía donde quedarse", indicaron y completaron: “Juan Gaineddu abandonó el mantenimiento de esa propiedad. Cuando ella fue a verla, se dio cuenta que estaba destruida y hoy no tiene plata para poder arreglarla".
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En el pico de su popularidad, Rímolo se presentaba como nutricionista, homeópata, psicóloga y especialista en terapias alternativas. Por ese entonces, era pareja del famoso presentador Silvio Soldán y atendía a estrellas de la farándula del nivel de Susana Giménez con un método para adelgazar.
Sin embargo, el fallecimiento de su paciente Lilian Díaz en 2001 y el posterior descubrimiento de que en realidad no era médica la condujo a nueve años de prisión y transformó su realidad en uno de los escándalos mediáticos más impresionantes de los últimas décadas.
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