Gabriel Corrado es un galán de telenovelas de los 90 y los 2000 que después de un tiempo alejado de la pantalla dio una entrevista recientemente. El actor dialogó con Sebastián Wainraich en su nuevo programa en El Trece y allí contó lo que le pasó con Luis Majul en el pasado.
Corrado dio a conocer que tenía un amigo en común con Majul, que se llamaba Sergio, y que por ese motivo son amigos con el periodista desde los 11 años. "¿Es verdad que estuviste preso y que caíste en cana con Luis Miguel Majul?", soltó el esposo de Dalia Gutmann ante la carcajada que provocó en su entrevistado.
"Sí y logramos salir. Teníamos 18 años, estábamos en un cumpleaños en Punta del Este de otro amigo nuestro y cayó la policía, éramos como 60 en el departamento ese, ahí en Kennedy y Gorlero. Porque unas chicas que nos habían conocido unos días antes habían robado unas recetas y habían puesto la dirección donde estábamos para comprar pastillas prohibidas en esa época. Pero nosotros no teníamos nada que ver, estábamos festejando un cumpleaños, disfrazados. Yo tenía como un enterito de jean, medio stone, medio en cuero, que se usaba en esa época, te estoy hablando de los años 70. A las chicas la llevaron en un celular y a los varones, caminando por Gorlero hasta llegar a la comisaría. Y nos tuvieron presos a los que vivíamos en ese departamento, que éramos Luis, Sergio, yo y otro chico, Marcelo. Los cuatro presos en un calabozo".
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"Primer amor, contexto, 17 o 18 años. Él me dejó de un día para el otro con un tupé total. Yo era bárbara la verdad, hasta el día de hoy no entiendo cómo me dejó. Y yo realmente sufrí como una condenada. Y, un día, coincidimos en un mismo barcito boliche, y él me ignoró toda la noche y yo muerta. Y yo mal entoné, salí del bar con mis amigas y estaba su auto estacionado en la puerta. Un Escort verde, agarré las llaves de mi cartera y se lo rayé de lado a lado. Y me fui caminando con una sensación de felicidad total", comentó la actriz en diálogo con Wainraich, en alusión a lo que vivió en su adolescencia.
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"La primera vez que viví solo, todo se venía abajo, ahí es donde estaba la rata que vivía en la cocina, abajo del horno. Yo tiraba un piedrazo y la rata salía y ahí yo me animaba a entrar", comenzó contando el rockero, sobre su primer domicilio. En esa línea, recordó: "Un día fue Andrés Calamaro y se encontró con esa rata. Me dice 'Joaquín, ¿tenés algo de comer que sea típicamente madrileño?'. Voy a la cocina y digo '¿estará la rata?. Abro la heladera y estaba todo vacío, salvo un paquete de mayonesa que tendría que estar en la basura y veo un pan todo mordido por la rata y también por mi gata que se llamaba La Cantina de David", aseguró mientras Wainraich explicaba que ese era el nombre de un reconocido restaurante de Colegiales.
Levinton concluyó la anécdota entre risas y caras de impresión por parte del staff del programa: "La rata y la gata jugaban con el pan que tenía un año. Ese pan estaba tirado en la cocina y lo meto en la mesa. Andrés lo agarra y dice 'qué bueno y le pone la mayonesa'. Si no lo mata eso".