Cuando el sábado pasado Andy Kusnetzoff invitó a Soledad Silveyra a su ciclo de PH Podemos Hablar (Telefe) y, en un momento dado, pidió que den un paso adelante todos los "hayan superado duras pruebas en su infancia o adolescencia", nadie se esperaba la dura revelación de la actriz, que abrió su intimidad para contar la historia de su madre suicida.
"Es muy difícil soportar el dolor del otro y la imposibilidad. Por qué no me ve a mí y se da cuenta que tiene que poder. Tiene que criarme. No pudo. Uno podrá hacer mucho psicoanálisis pero ese dolor genera heridas que te marcan", empezó a contar Soledad Silveyra ante la mirada atenta de los demás invitados.
Por otro lado, la actriz contó que su madre jamás aceptó que su hijo fuera homosexual y que, tras un intento por asesinarlo, se suicidó: "Mi mamá quiso matar a mi hermano, pensó que lo había matado y se mató ella. He pasado miles". "A los 6 años mamá se cortó las venas Le tuve que hacer yo el torniquete", contó Solita, detallando las reiteradas ocasiones en las que su progenitora mostró tendencias suicidas.
Meses atrás, Silveyra contó su experiencia tras el ACV que tuvo a principios de año y admitió, en el programa Almorzando con Mirtha Legrand (El Trece): “Dejé de fumar pero me cuesta, hago dieta y no como nada dulce. Tengo que caminar y tomar mucha agua”. Sobre el trauma que le quedó repuso: “Vivir ese momento hizo que me cambiar varias cosas. Todavía no me atrevo a manejar”.
Tras haberse recuperado, la actriz habló sobre cuáles fueron los indicios que la motivaron a solicitar una consulta con su médico. “En agosto mientras hacía Mujeres tuve un mareo muy raro, como un tembleque de la pierna, me habrá durado 30 segundos y el productor me agarró. En octubre tuve otro”, admitió.
Y recordó: “Después el 22 de diciembre mientras hacía las compras navideñas con mis nietas mayores, se me cayó la billetera y la cara de preocupadas de las chicas me hizo dar cuenta que tenía que ocuparme”
Actualmente, Solita se encuentra haciendo Dos locas de remate junto a Verónica Llinás en el teatro Astral, una comedia dramática que narra el reencuentro de dos hermanas que se vuelven a ver las caras después de 20 años en un duelo divertido y desopilante, donde tendrán que superar su pasado para poder tener un futuro, dando lugar a una disparatada tragicomedia que muestra el trasfondo social de las complejas relaciones familiares.