Eduardo Feinmann debutó en Radio Mitre (AM 790) en la conducción del programa Alguien tiene que decirlo y, en el pase con Jorge Lanata, protagonizó un nuevo papelón al aire. En esta ocasión, y tal y como sucedió en otras oportunidades, el periodista ultramacrista apuntó directamente contra el lenguaje inclusivo.
Luego de la comunicación con su colega que comanda Lanata sin filtro en el mismo dial, Feinmann derrapó y explotó contra aquellas personas que utilizan la "e" para incluir a la gente que no se siente representada en el idioma de habla hispana, y que cuenta con un lenguaje colmado de machismo.
Eduardo Feinmann explotó contra el lenguaje inclusivo: "Pelotudo"
En medio de las bromas en vivo con Lanata y con la locutora que se sumaba al programa, Eduardo Feinmann manifestó su odio y reconoció: “Yo detesto el lenguaje inclusivo”. Y agregó de manera insólita y repudiable que “la única cosa positiva es que sirve para darse cuenta automáticamente de quién es un pelotudo”. Por su lado, Lanata se rió, aunque apenas coincidió inicialmente en calificarlo como “tonto”.
En la misma dirección, el presentador de Lanata sin filtro opinó que “ellos (NdeR: refiriéndose a la gente que utiliza el lenguaje inclusivo) creen que el idioma va de arriba a abajo y es al revés". Además, quiso unir dos temas que no tienen nada que ver y expresó que "esto pasa también con la ideología: creen que podés terminar por decreto con la inflación".
"Tienen mucha confianza en que cuatro tipos arriba, en la cúpula, pueden manejar lo que millones hacemos abajo", insistió Lanata, que añadió que "no es así, al menos en una democracia". "Es ridículo que lo quieran imponer desde el Estado”, acotó Feinmann.
Por su lado, Lanata aseguró que “la RAE (Real Academia Española) está en contra" del lenguaje inclusivo y recordó que "en Francia se discutió en algún momento y no pasó nada”. De hecho, el periodista del Grupo Clarín planteó que “el lenguaje inclusivo funciona solamente en español y en algún otro idioma", ya que para él "en inglés es muy difícil y en francés es un quilombo". "Me parece que lo que hay que hacer es incluir, no hablar”, planteó, como si no pudieran hacerse ambas cosas al mismo tiempo.
Para cerrar, Lanata sostuvo que la cuestión de la inclusión va por otro lado y remató con un ejemplo personal: “Yo tuve problemas de movilidad y es un lío encontrar una rampa. Las veredas son un desastre y no podés pasar. Eso sería incluir, pero nada de eso pasa”.