Carmen Barbieri se sinceró en su programa sobre los tratamientos que hizo con la falsa médica Giselle Rímolo y señaló algunas consecuencias en su organismo de los fármacos que ingería. En su descargo, la madre de Federico Bal relató con lujo de detalles los eventos que vivió como resultado de las indicaciones de la ex de Silvio Soldán.
“Giselle quedó en libertad este miércoles, después de tantos años. No estuvo mucho tiempo presa en realidad, pero son muchos años de juicio. Las familias están luchando para que esta mujer pague su condena en la cárcel. En el 2001 la investigación la hizo María Laura Santillán y descubren que no era médica”, expresó Pampito Perelló, panelista en Mañanísima, el ciclo de Carmen Barbieri.
“Les daba el mismo remedio a todos. Yo tomé los remedios de la Rimolo. Estuve en su tratamiento, bajé cinco kilos. Eran unas pastillas, una la tenía que tomar en la mañana. Pero la que tomabas vos, la tomaba yo y la tomaban todos”, expresó Carmen por su parte y agregó: “me quitaban un poquito el apetito, seguramente tenían algo”.
Ante la consulta de Perelló sobre si esas pastillas eran anfetaminas, la ex jurado de Showmatch respondió con absoluta sinceridad: “No sé, no las mandé a analizar. Pero me quitaban un poquito el apetito, seguramente tenían algo”.
Barbieri hizo directa referencia a los síntomas que le generaba el consumo de esas pastillas y enunció: “En las primeras tomas me sentía rara. Porque cuando empezás a tomar un remedio te sentís distinto. Pero después me acostumbraba. No me aceleraban, ni me bajó la presión nada. Yo no la pasé mal, pero cuando me enteré que le daba las mismas pastillas a todo el mundo y que no estaba capacitada”.
Carmen Barbieri reveló que Silvio Soldán le recomendó a Giselle Rímolo
En aquel momento, fue Silvio Soldán, pareja de Giselle Rímolo en esos años, quien aconsejó a Barbieri para que siga las indicaciones de la falsa médica. “Ella iba a mi programa, ella promocionaba su tratamiento. Yo cuando iba a verla y estaba esperando llegaban micros para verla. A mí me la recomendó Soldán, me atendió en el garage de su casa y después tuvo la clínica en Belgrano”, reveló Carmen y siguió: “Corté porque me sentí rara. Me dolía la panza, estaba medio mareada y las dejé. Las tomé un par de meses y bajé cinco kilos”.