Walter "Alfa" Santiago se quebró en medio de la final de Gran Hermano y fue capturado por las cámaras de Telefe. Frente a esta situación, Santiago Del Moro frenó todo lo que estaba sucediendo en los estudios para cederla la palabra y el exparticipante del reality show especificó los motivos particulares de sus lágrimas.
La final de Gran Hermano despertó un sinfín de emociones. Tal es así, que tras un tape que mostró la producción de Telefe, "Alfa" era el único junto a Romina Uhrig que no estaba con una sonrisa en la cara como los demás exparticipantes. "¿Qué pasa 'Alfita'?", le preguntó el conductor frente a su notable emoción.
"Me pasa todo, es algo mágico que ustedes nos regalaron, que nos permitieron vivir. Es un antes y un después en mi vida", manifestó el sexagenario con lágrimas en los ojos. "Es un montón de emociones, de sensaciones, cariño, vivencias que para mí son... no se puede contar con palabras lo que estoy viviendo", agregó. Por su parte, Romina, quien también se mostró conmovida por el video que vieron los exparticipantes de su recorrido por la casa de Gran Hermano. "Es muy uferte ver todo esto. Momentos de alergía, de tristeza, llantos, la verdad que estoy muy agradecia con la producción de esta oportunidad enorme", sostuvo la exdiputada de 34 años.
Gran Hermano: Julieta quedó en tercer puesto y se quebró a pura lágrima
Luego de varias especulaciones por parte de los televidentes, Julieta Poggio se coronó en el tercer puesto en la final de Gran Hermano y protagonizó un emotivo momento. La bailarina y modelo abandonó la casa entre lágrimas, ovaciones y muchas emociones.
Con el 19,66% de los votos positivos a favor, la participante de 21 años de consagró en el tercer puesto de la competencia y se fue de la casa por primera vez en cinco meses. Sin embargo, lejos de sentirse abatida por la decisión del público, Poggio abandonó la competencia muy feliz y agradecida por todo los que había logrado en el programa.
"Gracias por todo, estoy muy feliz", dijo Julieta entre lágrimas y muy emocionada antes de despedirse de la casa de forma definitiva. Al ritmo de la canción que inventaron en la casa, Marcos y Nacho despidieron a la única mujer finalista y Julieta se fue eufórica y alegre por todo lo que se le venía. Una vez que llegó al estudio, sus fanáticos la esperaron en las afueras del canal con carteles, ovaciones y emoción, reflejándole lo que será su vida en los próximos meses. Contenta, Julieta se conformó con el puesto obtenido y se reencontró con sus amigos y familiares.