Un recorte de un momento vivido en la casa de Gran Hermano se volvió viral en las redes sociales por un fuerte cruce entre dos participantes del reality show de Telefe. Se trata de un hilo de Twitter que muestra lo ocurrido en cada rincón de la casa cuando sucedió el fuerte conflicto.
"Estaban Flor, Joel y Manzana en el sauna haciendo el 'streaming' y se escuchó un grito de afuera, enseguida cortaron a un tenso cruce entre Emmanuel y Catalina", comenzó su relato uno de los influencers abocados a GH más populares, bajo el usuario @eeemiliano. En ese momento, las cámaras apuntaron hacia Emmanuel y Catalina, quienes se fundieron en una fuerte pelea.
La joven le dio "puto" a Emmanuel y éste reaccionó sin tapujos, corrió hacia ella para hacerle saber que se había sentido discriminado. "Pegame", le decía Catalina mientras. Luego se pudo ver cómo Manzana se llevó a Emmanuel a una de las habitaciones para tranquilizarlo mientras que Cata entró a la casa al grito de "Yo me voy a la mierda". La concursante aseguró que no utilizó ese término de manera despectiva y contó que no discriminaría a personas homosexuales porque tiene muchos amigos gays.
Más tarde, Emmanuel acudió al patio para hablarle al público e hizo un extenso descargo: "Me grita la gente y se mueren de envidia. Sáquenlas por favor, así no se puede vivir, es violencia de verdad, sáquenlas, a todas..., vivamos como se tiene que vivir, en libertad, estoy cansado y mis compañeros también, no es un juego limpio, te discriminan, te maltratan, esto no es una cárcel". Y concluyó: "Toda la vida discriminado y me tienen que venir a discriminar acá, estoy harto, qué les importa si soy puto, no quiero que me traten así. No saben lo que es cumplir un sueño, toda la vida discriminado, maltratado, pegado, violado, para que estas minas me vengan a joder acá. Son una basura".
La fuerte historia de Emmanuel de Gran Hermano
"Pasé una infancia que las cosas lindas que me acuerdo así de pequeño, de 3 o 4 años, era que mi mamá me ponía Xuxa. Ya en esa edad era así como soy. Después empezaron los conflictos. Teníamos todos los problemas económicos habidos y por haber, no teníamos un peso. Comíamos lo que nos daba mi abuela", comenzó su descargo Emmanuel. Y agregó: "Íbamos a la casa de un primo que abusaba de mí. Después a los 9 años, también otra persona, un amigo de la familia. Nunca lo denuncié. No se hablaban de esas cosas antes, no me creían. Porque yo eso lo conté a los días y no me creyeron. Me vieron como 'no, imposible'".