Oscar Gaona fue el taxista que logró cautivar a los televidentes con su alegría. Es que hace pocos días, se ganó un auto 0KM en Bienvenidos a bordo, el programa conducido por Guido Kaczka en El Trece. Sin embargo, horas más tarde brindó un testimonio desgarrador en el que reveló cómo era su vida hasta antes de esta semejante noticia.
"Laburaba en la línea 101 desde las 0.37 hasta las 10 de la mañana. Después subía al taxi y me iba trabajando para mi casa. Yo vivo en La Boca. Mi señora me tenía toda la comida preparada, el baño, me acostaba y me levantaba a las 16.30 y salía a laburar con el taxi de nuevo hasta la noche”. Por eso remarcó: "Ahora cambió todo, me tengo que acostumbrar a esta nueva vida”, aseguró en diálogo con Nosotros a la mañana.
El abuelo que ganó un taxi en lo de Guido Kaczka analizó la economía argentina
No son tiempos fáciles en la República Argentina. Tras cuatro años de desmanejos presidenciales (entre 2015 y 2019), Mauricio Macri ha dejado un país devastado producto de políticas que golpearon los bolsillos de los más humildes.
En este sentido, Oscar Gaona aseguró lo duro que es llevar adelante el oficio de taxi y analizó la actualidad en materia económica dentro del país que actualmente gobierna Alberto Fernández: “Hay mucha inestabilidad en el país, nunca alcanza. Esto es una gran ayuda, pero voy a seguir trabajando. Le pido a toda la comunidad que el taxi no muera. Hay muchas familias que viven de esto. Está muy complicada la calle. Yo no me como ni una factura en la calle, me llevó mi termo con mate cocido, café o lo que sea y le doy hasta que pueda llevarme un mango a casa. A la mañana cuando salimos empezamos de cero todos los días”.
“La realidad es que estaba un poco negado, pero porque termino muy cansado, pensé que iba a tener que esperar mucho y nada que ver. Al contrario, fue todo rapidísimo”, enfatizó el abuelo que ganó un taxi en lo de Guido Kaczka. Por otra parte, el hombre que está casado hace más de 40 años, tiene cuatro hijas y 10 nietos reconoció haberse encomendado a su credo al momento de probar suerte en Bienvenidos a bordo: “Cuando pisé la tarima traté de ponerme en manos de Dios. Que sepan todos que Dios existe, todos tenemos una oportunidad”.