En un mundo cada vez más digitalizado, el uso de tarjetas de crédito y débito se ha vuelto la norma para realizar compras y transacciones. Sin embargo, los bancos advierten sobre los riesgos asociados con estas prácticas y comparten consejos esenciales para prevenir estafas y proteger tus datos personales. Acá te presentamos los 3 errores que no tenés que cometer al usar tu tarjeta de crédito en entornos digitales y físicos.
1. No te separes de tu tarjeta: protege tu identidad
Uno de los errores más comunes es descuidar la seguridad física de tu tarjeta. Por ley, nadie tiene derecho de retener tu tarjeta ni tu documento de identidad, mantené tu tarjeta de crédito o débito con vos en todo momento y nunca permitas que se aleje de tu vista. El robo de tarjetas es una amenaza constante, y prevenirlo depende en gran medida de tu propia vigilancia.
2. No compartas tus datos de acceso: protege tu privacidad
Tu información de acceso al homebanking y aplicaciones de pago es invaluable. Nunca reveles tu usuario ni tu contraseña a nadie, ni siquiera a supuestas empresas o instituciones. Las entidades bancarias nunca solicitan esta información por medios no seguros. Mantené tus credenciales seguras y únicas para vos, y así vas a evitar ser víctima de phishing y estafas de identidad.
3. No compartas detalles de tu tarjeta: mantené tu información segura
Los detalles de tu tarjeta, como el número, la fecha de vencimiento y el código de seguridad, son llaves que dan acceso a tu plata. No compartas esta información con terceros, incluso si parecen ser entidades legítimas. Los estafadores son expertos en engañar a las personas y hacer que revelen información sensible. Mantené estos datos confidenciales y solo ingresalos en sitios seguros y confiables.
Consejos clave para compras en línea
Además de los riesgos en compras físicas, las transacciones en línea también requieren precauciones especiales. Acá están los 3 consejos esenciales para prevenir estafas en internet al usar tu tarjeta de crédito:
1. Desconfiá de enlaces sospechosos: mantené tu información segura
Los correos electrónicos, mensajes de texto y enlaces de aplicaciones tercerizadas a menudo son utilizados para redirigir a sitios de phishing. Nunca ingreses información personal o financiera a través de estos enlaces. Accede directamente a la plataforma desde tu navegador para garantizar que estás en el sitio legítimo.
2. No almacenes datos sensibles: protege tu información
Aunque puede ser conveniente guardar los datos de tus tarjetas en sitios web y aplicaciones de pago, esta práctica aumenta el riesgo de exposición en caso de un hackeo. Si esta información es robada, los delincuentes podrían realizar compras en tu nombre. Es mejor ingresar tus detalles de tarjeta cada vez que realices una transacción.
3. Verificá la seguridad del sitio: protege tus transacciones
Antes de ingresar información en una tienda en línea, verificá que el sitio sea seguro y oficial. Busca un candado cerrado junto a la dirección web y comprueba que la URL comienza con "https://". Estas señales indican que la conexión es cifrada y segura.