Esteban Bullrich rompió el silencio y explicó cuál fue su razón para no asistir a la marcha en apoyo a Mauricio Macri, en Dolores, y por qué se ausentó en la sesión del Senado del jueves pasado. Una compleja cirugía mantuvo fuera de la escena política al referente de Juntos por el Cambio, que padece Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA). En redes sociales iniciaron una cadena de oración por Bullrich.
“Estoy muy bien. De buen ánimo. Me hicieron cirugía para poner gastrostoma. Por eso no estuve en la sesión ayer”, expresó Bullrich en declaraciones a Perfil, y revelando que ahora se realizó una gastrostomía para colocarse un botón gástrico. El legislador de Juntos por el Cambio, que anunció meses atrás que padece de la enfermedad del sistema nervioso que debilita los músculos y afecta las funciones físicas, continuó con sus actividades, a pesar de las dificultades para poder comunicarse, a raíz de la ELA.
Hace dos días, anticipó en su cuenta de Twitter que participaría de la movilización en Dolores en apoyo al expresidente Mauricio Macri en su presentación a declarar ante el juez Martín Bava, en marco de la causa que investiga presunto espionaje ilegal a los familiares de las víctimas del ARA San Juan. "Mañana voy a acompañar y a defender el honor de una persona y de una idea: la de que se puede gobernador sin robar, sin agredir y sin maltratar. A pesar de las arbitrariedades y los abusos del kirchnerismo, la gente sabe que no somos lo mismo", escribió.
No obstante, no se presentó en el lugar y en redes sociales comenzaron a especular sobre las razones de la ausencia del senador en la marcha, donde estuvo la gran parte de los dirigentes del partido. Frente a ello, los usuarios comenzaron a pedir una cadena de oración por la salud de Bullrich. “Me uno en oración para su recuperación. Te quiero Esteban Bullrich cuantos políticos como vos necesita esta Argentina. Fuerza Esteban”, escribió un usuario en la red social del pajarito.
Qué es un botón gástrico
Un botón gástrico es una sonda de silicona transparente que se coloca mediante una gastrostomía endoscópica percutánea. La intervención consiste en la inserción quirúrgica (con ayuda del endoscopio) de una sonda a través de la piel del abdomen hasta el estómago. De este modo, se puede alimentar, darle la medicación y descomprimir el estómago del paciente. Además, la sonda gástrica puede durar más de un año antes de que se necesite reemplazarla, y, para hacerlo, el médico no necesita realizar intervención endoscópica o quirúrgica una vez que la vía esté colocada.