En esta época de calor, en la que uno puede darse una ducha, meterse en la pileta o en el mar para refrescarse, es posible que se meta agua en los oídos y se genere esa sensación tan horrible de incomodidad. Este problema, causado principalmente por un canal auditivo estrecho o un exceso de cerumen, puede resultar incómodo y, en casos prolongados, potencialmente problemático.
Sin embargo, existen métodos simples y efectivos para eliminar el agua de los oídos sin causar daño alguno. En este artículo repasamos las mejores opciones.
Cómo prevenir el agua en los oídos
Uno de los métodos más comunes para deshacerse del agua atrapada en los oídos es secar suavemente el área con una toalla después de bañarse. Inclinar la cabeza hacia un lado y crear un pequeño vacío con la palma de la mano puede ayudar a que el agua salga del canal auditivo. A continuación, los mejores métodos.
MÁS INFO
- Utilizar un secador de pelo en una configuración de temperatura baja y mantenerlo a una distancia segura del oído puede facilitar la evaporación del agua residual.
- Los baños de vapor, como los vahos para descongestionar las vías respiratorias, también pueden ser útiles para eliminar el agua de los oídos. Para ello, basta con colocar la cara sobre un recipiente con agua caliente y cubrirse con una toalla para atrapar el vapor. Este método ayuda a abrir los conductos auditivos y facilitar el drenaje del agua acumulada.
- Esperar a que la gravedad haga su trabajo mientras se está acostado del lado del oído afectado puede ser una estrategia efectiva.
- Masticar, bostezar o mover la mandíbula también pueden ayudar a estimular el movimiento del agua fuera del oído.
Cómo evitarlo
Para prevenir la acumulación de agua en los oídos.
- Se pueden utilizar tapones de silicona diseñados específicamente para evitar la entrada de agua durante actividades acuáticas. Estos tapones son cómodos de usar y proporcionan una barrera efectiva contra el agua.
- Por otro lado, es importante evitar ciertas prácticas que pueden aumentar el riesgo de obstrucción o lesión en los oídos, como limpiarlos excesivamente, usar bastoncillos de algodón, sacudir la cabeza violentamente o introducir objetos extraños en el canal auditivo.
- En casos donde la sensación de agua en los oídos persiste o se acompaña de dolor, pérdida auditiva u otros síntomas preocupantes, es recomendable buscar atención médica para recibir un diagnóstico adecuado y un tratamiento apropiado.
Aunque la presencia de agua en los oídos puede ser molesta, existen técnicas seguras y efectivas para eliminarla. Siguiendo estos consejos y precauciones, se puede cuidar de los oídos y disfrutar del agua sin preocupaciones.