Con la llegada del calor, optamos por comidas livianas que no caigan pesadas al organismo y resulten frescas, para contribuir a una dieta nutritiva en vitaminas. Una buena manera, es consumiendo vegetales y elaborando variadas preparaciones con ellos. De esta manera, no solo se incentiva la creatividad del cocinero sino que es una buena manera de acercar a los más chicos a alimentos como la acelga, por ejemplo. Y un clásico que no falla nunca son los buñuelos, bocadillos o croquetas de acelga. Rápidas de hacer, pueden consumirse frías o calientes.
Receta de buñuelos de acelga
Ingredientes para cuatro raciones
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1 atado de acelgas
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1 cebolla de verdeo
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1/2 cebolla
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2 huevos
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1 diente de ajo
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200grs de harina leudante
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100grs de queso Reggianito, tipo parmesano
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leche (un poco, menos de una taza)
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sal
Cómo hacer buñuelos de acelga
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Lavar el atado de acelga y separar las pencas de las hojas. Con las pencas separadas, las hojas deben ponerse directo en una olla con agua y sal. Dejar hasta que hieva, colar y esperar a que se enfríe para poder escurrir.
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En la sarten freír las cebollas y el ajo picado (bien chiquito).
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Revolver continuamente hasta que la cebolla quede transparente y blanda.
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Poner en un bol los huevos, batir y agregar las acelgas picadas. Revolver bien e ir agregando la harina poco a poco, revolviendo cada vez. Si queda muy espesa agrega un poquito de leche, sin excederse. .
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Calentar el aceite, y freír los buñuelos: cuando se hayan dorado de un lado, dar la vuelta y dorar del otro.
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Sacar y poner sobre papel de cocina para que escurra el aceite que sobre.
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Servir como bocaditos con una rica ensalada. Pueden disfrutarse fríos o calientes, aunque se recomienda consumir calientes, debido a que son más crujientes.