La focaccia genovesa es un delicioso pan italiano, caracterizado por su textura esponjosa y su sabor a aceite de oliva y hierbas aromáticas. Originaria de Génova, esta receta de cocina es perfecta para acompañar comidas o simplemente disfrutar como un aperitivo. A continuación, se detalla cómo preparar esta focaccia de manera fácil y rápida.
Ingredientes para la masa de focaccia
Para comenzar, es esencial contar con los ingredientes adecuados para la masa de focaccia. Estos son:
- Harina 0000: 500 gramos
- Levadura fresca: 15 gramos
- Sal: 1 cucharada
- Agua: 300 cc
- Aceite de oliva: 75 cc
Estos ingredientes básicos forman la base de una focaccia clásica, asegurando una textura y sabor auténticos.
Preparación de la masa
Paso 1: hacer la corona de harina
En una superficie limpia, hacer una corona con la harina. Esta técnica tradicional italiana ayuda a incorporar los ingredientes de manera uniforme. Espolvorear la sal alrededor del borde exterior de la corona para evitar el contacto directo con la levadura al inicio.
Paso 2: incorporar levadura, agua y aceite
En el centro de la corona, agregar la levadura fresca desgranada. Luego, verter el agua y el aceite de oliva. Estos líquidos ayudarán a activar la levadura y unir la masa.
Paso 3: mezclar y amasar
Comenzar a unir los ingredientes con las manos, incorporando gradualmente la harina del borde hacia el centro. Continuar amasando durante varios minutos hasta obtener una masa lisa y homogénea. Este proceso es crucial para desarrollar el gluten y lograr una buena estructura en el pan.
Paso 4: dejar reposar
Cubrir la masa con un paño limpio y dejar reposar a temperatura ambiente hasta que duplique su tamaño. Este paso permite que la levadura fermente, creando una masa esponjosa y aireada.
Ingredientes Adicionales
Para dar un toque especial a la focaccia, se pueden añadir los siguientes ingredientes:
- Sal gruesa: 1 cucharada
- Tomates secos hidratados: 1 puñado
- Aceitunas negras sin carozo: 1 puñado
- Romero: al gusto
- Queso provolone: 250 gramos en cubitos
Estos extras aportan sabores intensos y texturas variadas que complementan perfectamente la base de la focaccia.
MÁS INFO
Armado y cocción de la focaccia
Paso 1: Preparar la asadera
Untar una asadera con una base de aceite de oliva. Esto evitará que la focaccia se pegue y le dará un sabor adicional.
Paso 2: Estirar la masa
Disponer la masa en la asadera y estirarla con los dedos sin presionar demasiado. La técnica de estirado con los dedos es tradicional en la preparación de focaccia, creando pequeños hoyuelos en la superficie.
Paso 3: Añadir los ingredientes
Untar la superficie de la masa con aceite de oliva y espolvorear con sal gruesa. Luego, incrustar suavemente los tomates secos, los cubitos de queso provolone y las aceitunas en los hoyuelos hechos con los dedos. Aromatizar con romero para un toque final de sabor.
Paso 4: Cocinar
Precalentar el horno a una temperatura alta y hornear la focaccia durante unos 20 minutos o hasta que esté dorada. La focaccia debe tener una textura crujiente por fuera y esponjosa por dentro.
Servir y disfrutar
Una vez lista, la focaccia genovesa puede ser servida caliente o a temperatura ambiente. Es ideal para acompañar una variedad de platos, desde ensaladas hasta carnes, o simplemente disfrutarla sola.