La quiniela es uno de los juegos de azar más populares en Argentina, y radica en la simplicidad de las apuestas y en la posibilidad de obtener premios inmediatos. Este juego, que está administrado por las provincias y el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, permite a los apostadores probar suerte hasta pocos minutos antes de cada sorteo.
Se realizan de lunes a viernes, además de uno los sábados. Lo que diferencia a la quiniela de otros juegos es que no cuenta con un pozo acumulado, sino que el premio depende directamente de la cantidad apostada y del número de cifras acertadas.
¿Cómo se juega y cuánto se gana?
El apostador en la quiniela debe elegir un número compuesto por una, dos, tres o cuatro cifras, comprendido entre 0 y 9999. Los sorteos diarios se realizan utilizando cinco bolilleros, uno para cada dígito: millar, centena, decena, unidad, y un quinto bolillero para determinar la ubicación del número entre los primeros 20 puestos de la tabla de resultados.
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Los premios varían dependiendo de cuántas cifras se acierten. Si un jugador acierta las cuatro cifras, el premio será de 3.500 veces el valor de la apuesta. Para tres cifras acertadas, el apostador multiplicará su apuesta por 600. En el caso de acertar dos cifras, el premio se multiplica por 70, y si sólo se acierta una cifra, se multiplica por 7.
Por ejemplo, en la Ciudad de Buenos Aires, si se apuesta el mínimo de $15 y se aciertan las cuatro cifras, el premio será de $52.500. Si se aciertan tres cifras, se ganarán $9.000; dos cifras, $1.050; y una cifra, $105.
La modalidad Redoblona: mayores riesgos, mayores recompensas
Una de las modalidades más conocidas de la quiniela es la Redoblona. En esta variante, el jugador elige dos números de dos cifras, comprendidos entre 0 y 99, y debe acertar tanto los números como su ubicación en los primeros 20 puestos de la tabla. El premio en esta modalidad depende de la relación entre las cifras apostadas y el lugar en que aparecen en el sorteo.
Si el primer número elegido sale en la cabeza (primer lugar) y el segundo en el quinto puesto, por ejemplo, el premio se calcula dividiendo el importe apostado por la cantidad de lugares elegidos y multiplicándolo por la relación de pago correspondiente. Un ejemplo concreto de la Redoblona sería el siguiente: si se apostó a dos números y el primero sale a la cabeza y el segundo en el quinto lugar, el premio se calcularía multiplicando 70/5*70, resultando en un premio proporcional al riesgo de acertar ambos números en posiciones específicas.