En un acto irresponsable y rompiendo los protocolos del restaurante Graf Zeppelin de Ciudad Jardín, el periodista Nicolás Wiñazki fue denegado del acceso al recinto gastronómico por excederse en la cantidad de personas para ocupar una mesa. Junto a siete familiares, este protagonista solicitó una mesa para ocho, según indicó el mismo, siendo que en este establecimiento sólo se permiten cuatro comensales por grupo.
Luego del altercado, Wiñazki no sólo explotó de furia y manifestó su malestar, de forma incomprensible, sino que también le alegó el rechazo del restaurante a cuestiones meramente políticas: "Me pegaron en la calle, recibí insultos fuertes, tuve unas cuantas discusiones, pero nunca imaginé que podía pasarme algo así. Era la primera vez que salía a cenar con mi familia, estaba mi mamá, mi suegra, mis hijos, y cuando le dije cuántos éramos me dijo que no me iba a poder atender".
Asegurando que el dueño del lugar le expresó que ya no es más "bienvenido" en Graf Zeppelin, Wiñazki prosiguió: "Enseguida me di cuenta que era por mi laburo y lo primero que me salió decirle es ‘vine siempre a este lugar’. Mi esposa se enojó más que yo y hoy me hizo notar que el dueño nos dijo que le habíamos hecho mal a la Argentina. La verdad, un disparate”.
“Nunca me peleé y no quería arruinar ese momento familiar en el que mi hija había egresado del jardín, pero es una Argentina delirante”, sentenció Nicolás Wiñazki, en diálogo con Teleshow. Por su parte, el restaurante no se ha expresado al respecto y no ha contestado las llamadas que El Destape realizó para corroborar o desmentir la versión expuesta por el periodista de TN.
Las personas que salieron a defender a Nicolás Wiñazki: su padre y Teresa Ferrari
Tanto su padre, Miguel Wiñazki, como su colega Teresa Ferrari se solidarizaron con el supuesto hecho sufrido por el conductor de la señal macrista. "Mi absoluta solidaridad con Nicolás Wiñazki a quien no dejaron entrar en el restaurante Graf Zepelín de Ciudad Jardín por no ser K. Esta vez no le tenemos miedo", expresó la periodista, quien agregó: "No aliento para nada que no vayan más al lugar, pero estas cosas no pueden pasar. El derecho no es discrecional, tiene que estar explicado el porqué. No puede ser que te discriminen por ideología, por raza, por vestimenta, por apariencia o, como en este caso, por el trabajo de uno”.
En tanto, el familiar de Nicolás Wiñazki compartió un tuit donde se indicó el presunto hecho acontecido en Ciudad Jardín y agregó un comentario breve en donde trató a los dueños del lugar como "intolerantes" y "antidemocráticos".