En el corazón de Misiones, sobre la Ruta Nacional 12, se encuentra Capioví, un pequeño pueblo que cada diciembre se transforma en el epicentro de la magia navideña en Argentina. Reconocido como el "pueblo más navideño del país", Capioví deslumbra con una celebración única que combina tradición, creatividad y conciencia ambiental. Esta transformación es el resultado del esfuerzo comunitario de sus vecinos, quienes cada año diseñan y construyen decoraciones hechas con materiales reciclados.
Capioví está ubicado a 115 kilómetros al norte de Posadas, la capital de Misiones, y a unos 155 kilómetros de las Cataratas del Iguazú, lo que lo convierte en una parada estratégica para los turistas que recorren la provincia. Si viajás desde Posadas, podés tomar la Ruta Nacional 12 en auto o en colectivo, ya que varias empresas de transporte ofrecen servicios regulares hasta el pueblo.
Desde finales de noviembre hasta fin de año, el pueblo se viste de fiesta con luces, figuras gigantes y adornos que embellecen cada rincón. El epicentro de la celebración es la Plaza de los Pioneros, donde se levanta el emblemático árbol de Navidad, que en su última edición alcanzó los 14 metros de altura y fue construido con 15.000 botellas plásticas recicladas, bolsas de leche y focos LED reutilizados. Este año, el diseño estuvo a cargo de la artista Úrsula Kleiner, quien explicó que cada adorno tiene un significado especial: las velas simbolizan paz y espiritualidad, mientras que las mariposas monarca evocan transformación y renovación.
Las decoraciones, creadas con materiales reciclados como botellas, tapitas y argollas, incluyen figuras como ángeles, estrellas, mariposas, y un Papá Noel de 4 metros iluminado con luces LED. Desde 2010, la ornamentación se expandió por avenidas, plazas y edificios emblemáticos del pueblo, como el hospital y la sede del municipio. Además, el grupo “Decoración Navideña en Capioví” profesionalizó la fabricación de los adornos, involucrando a voluntarios de todas las edades y promoviendo una conciencia ecológica.
Las veladas navideñas, que se realizan los fines de semana, ofrecen espectáculos artísticos y musicales que aportan un clima festivo y familiar. La feria de artesanos es otra de las grandes atracciones, donde los visitantes pueden encontrar productos locales y recuerdos únicos.
Este año, la celebración sufrió un revés cuando un cortocircuito provocó un incendio que destruyó el árbol principal. Sin embargo, el espíritu de Capioví permanece intacto. En el lugar del árbol, los vecinos instalaron una decoración simbólica con flores blancas y mariposas monarca, mientras se trabaja para reconstruirlo con el apoyo de escuelas técnicas y voluntarios de toda la provincia.
Por qué se arma el árbol de Navidad el 8 de diciembre
En Argentina y en diferentes partes del mundo, el árbol de Navidad se arma el 8 de diciembre, en el Día de la Inmaculada Concepción de la Virgen María. Se trata de una de las mejores actividades para hacer en familia, y es la que da comienzo a la temporada que termina con la fiesta del nacimiento del Niño Jesús. Por qué se arma este día el árbol y quién lo definió.
La Navidad es una celebración cristiana y se suele armar el árbol de Navidad el 8 de diciembre porque coincide con la celebración de la Inmaculada Concepción de la Virgen María, día en el que la Iglesia Católica proclama que la Madre de Dios fue concebida sin pecado original. Con esta celebración, se busca resaltar los valores de fe, empatía y caridad, que se ven representados en la Virgen María, adorada como la madre de Jesucristo, nacido según la religión por obra del Espíritu Santo a través de la intercesión divina. Esta fecha fue establecida por el Papa Pío IX en 1854.
Así, las familias adoptaron el 8 de diciembre como el día para comenzar las festividades navideñas en el que el armado del arbolito de Navidad simboliza el comienzo del tiempo de Adviento, un período de preparación para celebrar el nacimiento de Jesús. Aunque esta costumbre tiene sus raíces en la religión, con el tiempo se ha popularizado como una tradición familiar y cultural, más allá del aspecto religioso. Y, si bien para la Iglesia el árbol navideño se arma el 8, muchos hogares de familias no creyentes en diferentes lugares del mundo comienzan a armar el árbol el 1° de diciembre.
En Argentina la tradición de armar el árbol de Navidad comenzó a principios del siglo XIX. El primer árbol documentado data de 1807 y fue construido por un inmigrante irlandés en una plaza pública que había llegado a América Latina de Estados Unidos y decoró el pino de acuerdo a la costumbre arraigada en su país de origen. Incluso, en Argentina esta fecha es un feriado nacional, aunque en este 2024 no habrá un día de descanso extra porque cae un domingo.