El cine negro vuelve con mucho color y protagonizado por Colin Farrell en "Sugar", una nueva serie de Apple+ ambientada en el Los Ángeles actual.
El papel de un detective privado que lucha contra sus demonios internos mientras sigue la pista de la nieta desaparecida de un productor de Hollywood es un sueño hecho realidad para el ganador del Globo de Oro al mejor actor por "The Banshees of Inisherin".
"Me encanta el cine negro, y mi amor por él es anterior a esta serie, así que conocía muy bien ciertos tropos", dijo Farrell en una entrevista.
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El género negro comenzó con las películas policíacas de las décadas de 1940 y 1950, con sombras nítidas, personajes pesimistas, humo y calles lluviosas en blanco y negro.
"Era muy consciente del aspecto de tropo arquetípico de esas cosas", dijo Farrell, cuyo personaje, John Sugar, trabaja en un caso que pone patas arriba todo su mundo.
La serie, que se estrena el viernes, yuxtapone los coloridos paisajes de Los Ángeles con escenas que parecen de Hollywood noir vintage. Las escenas entre los personajes están editadas de formas que sorprendieron a los actores.
"Sabía que estaba rodando un 'noir', pero una vez terminado mi proceso, hay un proceso creativo posterior completamente distinto", explica la actriz británica Kirby Howell-Baptiste, que interpreta a Ruby, la mánager de Sugar, en un giro contemporáneo.
"Así que cuando la vi, la voz en off era un misterio para mí, todo ese metraje que se corta en ella, la forma en que se corta, todo eso era un misterio"
Farrell recuerda con cariño algunas noches en las que rodaban imágenes en autos: El director de fotografía Cesar Charlone se sentaba en el asiento del copiloto y Farrell les llevaba al centro de Los Ángeles durante 40 minutos.
Con información de Reuters
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