Con la cantidad de años de trayectoria que tiene como cantante, Luciano Pereyra sabe muy bien cómo manejar a su público y enfrentarse a las diversas situaciones que suceden arriba del escenario. Sin embargo, hay algunas circunstancias que lo toman desprevenido y tiene que improvisar para que el show continúe, esto mismo es lo que sucedió en una de sus últimas presentaciones.
En el marco del Festival Nacional de Folklore de Cosquín, específicamente en la quinta luna, Pereyra tenía programada su presentación, por lo que el predio se llenó de fanáticos desde temprano a la espera del show. Sin embargo, las condiciones climáticas no acompañaron y generaron algunos inconvenientes para el recital tan esperado.
"Cuando algún día mis nietos me pregunten qué es el amor del público les mostraré este vídeo", escribió Luciano en sus redes sociales junto a un clip en donde se veía al público incondicional cantando sus canciones a pesar de la lluvia. Lo cierto es que el temporal afectó de forma directa la estructura del show, ya que interfirió en los comandos y generó algunos desperfectos técnicos. Por este motivo, el intérprete de Que suerte tiene él se vio obligado a cambiar la lista de canciones para continuar con el show con sus instrumentos y de forma individual mientras se solucionaba la situación.
"Muchas veces estamos listos para empezar y suceden pequeñas cosas. Hay casi diría yo un batallón de técnicos trabajando detrás del escenario para solucionar todos los problemas", expresó en ese entonces Luciano Pereyra para contar lo que había sucedido a su público. De todas maneras y afortunadamente, el cantante contó con el apoyo de su público, quien acompañó a coro el nuevo repertorio propuesto de forma improvisada.
Pese a los obstáculos, Luciano Pereyra y su equipo lograron esquivar las dificultades y acomodarse para brindar el show planeado. Así es como, a lo largo de una hora, el cantante interpretó sus mayores éxitos y comprobó una vez más la fidelidad de su público.
Signado por la lluvia: otro show cancelado en Córdoba
Unas semanas antes de este incidente que lo acompañó en la ciudad de Cosquín, Luciano había enfrentado otro inconveniente en un show programado en Córdoba. El cantante tenía que presentarse en el Festival Jesús María, pero debido a las malas condiciones climáticas y a la intensa lluvia, su show se suspendió y tuvo que se reprogramado.
De esta forma, Pereyra cantó en aquella famosa "noche extra" que se le añadió al clásico evento de doma, en donde también compartió escenario con Tini y Los Palmeras.