Los admiradores de Beyoncé, conocidos colectivamente como "BeyHive", están desesperados por verla durante su gira "Renaissance World Tour".
El dinero y la distancia no son un problema cuando tu ídolo da 57 conciertos en 40 ciudades de Norteamérica y 14 de Europa.
Jimmy Long, de San Francisco, voló a Estocolmo para asistir al concierto inaugural del 10 de mayo después de hallar asientos en la primera fila del "Club Renaissance" por 370 dólares, una ganga comparada con entradas similares que cuestan 1.200 dólares o más en Estados Unidos.
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"Le mandé un mensaje a mi novio: '¿Quieres ir a Suecia? ¿Sí o no? Tenemos 9 minutos para decidirnos'".
Ayo Awokoya, residente en Inglaterra, se sentía animada a pesar un arduo viaje en tren entre Manchester y Londres que duró seis horas en lugar de 4 horas y media.
"Cuando llegué allí me sentí como en una experiencia increíblemente grandiosa", afirmó.
Beyoncé resultó imperdible para algunos que se han replanteado sus prioridades en la vida.
"Los profesores lo pasaron muy mal, yo perdí a gente de mi familia" en la pandemia, dijo Janny Nascimento, profesora de primaria en Río de Janeiro. "Después de eso tuve ganas de vivir, de salir y hacer cosas que nunca había hecho antes".
Janny desembolsó 6.000 reales (1.199,21 dólares) para realizar su primer viaje en avión, además de los 5.000 reales de las entradas para el Club Renaissance de Fráncfort, Alemania.
(1 dólar = 5,0033 reales)
Con información de Reuters
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