El legendario cantante Sandro habría cumplido 76 años el pasado 19 de agosto. Para conmemorar este día tan especial, la esposa ya viuda del artista, Olga Garaventa y Gisela Marziotta, diputada del Frente de Todos (FDT) se unieron para inaugurar una escultura en honor al músico. La obra, llamada Sandro iluminado, fue exhibida en el barrio de Boedo, en la puerta del centro cultural y bar Castillo de Sandro, ubicada en Pavón 3939.
Se trata de una figura de bordes negros, sin relleno, con luces cálidas a su alrededor. El artista a cargo de este proyecto fue Alejandro Marmo. El establecimiento había sido diseñado y mandado a construir por el mismo Sandro durante la década del 80, y originalmente, allí estaban sus oficinas. Más tarde, el lugar fue tomado de forma ilegal, hasta que se volvió a recuperar y se transformó en un centro cultural.
“Estoy feliz de este homenaje a mi esposo justo en este lugar tan emblemático para mí, tiene mucha historia, porque es donde lo conocí trabajando y después terminó siendo mi esposo. Este es un regalo que agradezco”, sentenció Olga. “Aunque pasaron tantos años, me parece increíble todo lo que viví”.
“Es muy emocionante este encuentro en homenaje a Sandro. Gran ícono de la cultura argentina que a partir de hoy quedará iluminado en esta escultura de hierro, levantada en la torre del Castillo que el propio artista diseñó, construyó y hoy es un centro cultural”, expresó Marziotta, quien espera que este proyecto se declare de interés cultural. “Estamos empezando a salir de la pandemia y es muy bueno reivindicar estos espacios culturales de la Ciudad”.
Quién es Alejandro Marmo
El artista plástico Alejandro Marmo, de 50 años, nació en el partido Tres de Febrero, en la provincia de Buenos Aires. Sus obras, siempre inspiradas en su búsqueda por la representación de todos los sectores sociales, se destacan por estar fabricadas con desechos de fábricas y objetos que fueron descartados. Él fue el autor del Cristo Obrero, obra instalada en Villa Soldati, y del famoso retrato gigante y luminoso de Evita, que está sobre la Avenida 9 de Julio.
Marmo siguió los mismos pasos que el reconocido artista Antonio Berni, nacido en mayo de 1905. Berni, que vivió en Rosario y más tarde se profesionalizó en Europa y conoció el marxismo, revolucionó la historia del arte argentino, mezclando el surrealismo con la realidad social, creando así el nuevo realismo. Sus obras partían del mismo lugar que el de Marmo: la idea de que el arte no debe ser algo etéreo, pretencioso y exclusivamente de propiedad de las clases altas, sino que debe ser representativo. A partir de él, muchos artistas tomaron su idea de pintar y crear desde la basura.
En 1990, Alejandro creó el proyecto Arte en las fábricas, que masificó y extedió el arte hacia los sectores industriales, posibilitando que obreros y personas de bajos recursos también puedan hacer arte. Así, se crearon obras de arte en fábricas, con elementos obtenidos de desechos industriales. Alejandro también amplió esta posibilidad para los habitantes de Fuerte Apeche, de la Villa 31 y de algunos sectores de la provincia de Chacho.
La visita virtual por la mansión de Sandro
Además de la obra de Boedo, también se conmemoraron los 76 años de Sandro con un proyecto innovador: un recorrido virtual por su verdadera casa. Originalmente, la mansión de Sandro puede ser recorrida de manera presencial, pero con la pandemia del coronavirus, se pensó una alternativa para que sus fanáticos puedan recorrerla sin moverse de sus casas.
Mientras pasean por cada una de sus habitaciones, sus seguidores tienen la posibilidad de hacer el paseo mientras escuchan sus canciones. El hogar de Sandro, de dos plantas y ubicado en Banfield, está todo decorado al estilo rococó, con paredes blancas, alfombras rojas y grandes pinturas colgadas en marcos dorados, tal como en un palacio o en un museo antiguo. La entrada es gratuita y se puede obtener en